La ola de calor que está viviendo la Península Ibérica está poniendo en jaque todas las políticas forestales y medio ambientales que estaban presentes hasta el momento. Uno de los incendios forestales más grandes hasta el momento es el que se está viviendo en Zamora, que ya ha alcanzado una superficie de 60.000 hectáreas y ha obligado a desalojar a varios vecinos de la zona con la intención de mantenerles a salvo y alejados del feroz fuego que azota desde hace varias semanas la provincia.
La gestión de la Junta de Castilla y León ha estado en entredicho desde el inicio del desastre ecológico. La falta de recursos y una inexistente política climática han sido las principales causas junto a las altas temperaturas de estos incendios. En una entrevista concedida a Cadena Ser, el consejero de Medio Ambiente de la Comunidad Autónoma, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha apuntado que "las nuevas modas del ecologismo extremo" como una de las áreas en las que trabajar para gestionar los incendios.
Desde la Junta, siendo fieles a su socio en el gobierno que evita decir "cambio climático", achacan esta situación a los efectos climáticos, los cuales tendrán que trabajar para paliarlos. Por ello, el consejero ha admitido que tendrán que "aumentar la capacidad y dar una mayor respuesta posible" todos los miembros que están luchando contra el fuego. Según el especialista, las labores de limpieza se dificultan con la presencia de "determinadas posiciones del ecologismo extremo dificultan la actuación en el monte y su limpieza, es uno de los factores que suman para impedir un mejor estado de los bosques".
Maldita hemeroteca
Suárez-Quiñones ha admitido que la provincia de Zamora se enfrente a una nueva realidad, donde los incendios se han producido por distintos motivos. Según el consejero, desde la Junta de Castilla y León contratarán durante todo el año a las 900 personas que están en este momento luchando contra el fuego. Estas declaraciones se contradicen con la visión que tenía en 2018, donde aseguraba que era "absurdo" mantener el servicio prolongado en el tiempo, algo que supondría un gasto elevado en formación.
El malestar en la oposición es evidente. En el caso del PSOE, exigen que el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, pida perdón y cese al consejero. El líder de la oposición en las cortes, el socialista Luis Tudanca, ha recordado que la Junta solo invirtió en política forestal 15,31 euros por hectárea, una cifra que choca con la de la media nacional, que se sitúa en 32: "Eso es lo que provoca estos incendios, tienen que dar la cara, se lo deben a los vecinos".
Desde el gobierno, la Ministra de Defensa, ha instado a las Comunidades Autónomas donde se hayan producido mayores incendios en 2022 que no "se regatee en medios materiales ni personales", algo que será esencial para la prevención de incendios forestales. Actualmente la Comunidad de Castilla y León es la más afectada. De los focos activos, el que está dándose por controlado es el de San Juan de la Nava, en Ávila. Por su parte, un nuevo foco en Vegalatrave causó la evacuación de seis municipios.
