La Asociación de Abogados Cristianos ha sido condenada a pagar las costas del juicio contra Drag Sethlas. Con ello, se confirma la decisión del Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, que ya decretó el sobreseimiento provisional y el archivo de la querella presentada por la Asociación de Abogados Cristianos contra Borja Casillas por su actuación en en los carnavales de Las Palmas en la que se transformó en Drag Sethlas para hacer un espectáculo vestido de virgen y de Cristo crucificado. La jueza no ve delito en la actuación de Drag Sethlas y la enmarca en el "derecho a la libertad de expresión".
Ante las quejas recibidas por el Obispo de la provincia y las reacciones de diversos colectivos religiosos, la Fiscalía de Las Palmas ya había llevado a cabo una investigación en las semanas posteriores a la celebración del carnaval determinando que el espectáculo ni tenía ninguna "voluntad de ofender" a la religión, sino que se trataba de una "crítica ácida".
La Fiscalía subrayó que, para que exista un delito como el que se barajaba, no es suficiente con que un grupo de creyentes se haya sentido ofendido, porque ello provocaría que "la aplicación del Código Penal quede en manos de la mayor o menor sensibilidad de quienes profesan una determinada religión". El Ministerio Fiscal recordaba además que nadie de la organización del carnaval advirtió a Sethlas sobre el contenido potencialmente ofensivo de su espectáculo, que ya habían podido observar en la gala de preselección (con público pero sin cámaras).
Ahora, el auto de la jueza Estela María Marrero dado a conocer este lunes 18 de enero, prácticamente reproduce los argumentos de la Fiscalia. Así, considera "dudoso" qe durante la actuación de Drag Sethlas se haya mantenido una postura negacionista de los dogmas religiosos. Lo que hace, a su juicio, es "una representación coreográfica en la que se utiliza la imagen de la Virgen María y de Jesús crucificado, en un contexto que pretende simular una procesión propia de la Semana Santa y con un relato de fondo que puede interpretarse como de cierta connotación sexual y que hace una referencia, más o menos, explícita a lo que los católicos consideran el sacramento de la penitencia".
Las referencias a la religión en el contexto del carnaval no son en absoluto extrañas o infrecuentes
La jueza reconoce que la actuación de Drag Sethlas puede haber ofendido los sentimientos religiosos de un determinado número de personas o incluso ser considerada irrespetuosa, pero "no es necesariamente ofensiva en el sentido jurídico penal del término", por lo que no considera debidamente justificada la perpetración del delito.
Drag Sethlas se defiende
Borja Casillas, protagonista de la polémica, ha señalado a EFE que "en ningún caso" quiso ofender, sino provocar e impactar al público. "Es increíble, pero cierto, que en pleno siglo XXI este asunto haya llegado a hasta aquí, cuando obviamente hay muchísimas cosas más preocupantes que se nos escapan de las manos y ante las que no hacemos nada", se ha defendido.
Aunque Casillas ha confesado que llegó a preocuparse por esta denuncia, ha reconocido que no se arrepiente ni se avergüenza del espectáculo que realizó y que le coronó como la reina Drag Queen de los carnavales de Las Palmas 2017: "Claro que lo repetiría, porque, como he dicho mil veces, no tenía más intención que la de hacer un buen espectáculo y dejar a la gente con ganas de más".
