El juez ha absuelto al líder de Más País, Íñigo Errejón, de la acusación de haber pateado en el estómago a un vecino de Lavapiés en mayo de 2021. El magistrado entiende que las pruebas no permiten demostrar "cómo se produjeron los hechos" y que ni los informes médicos y las declaraciones permiten demostrar la patada a un hombre que le había pedido hacerse una foto.
La sentencia, en este sentido, no deja lugar a dudas: "El denunciante, tal y como reconoce en su declaración, no fue a urgencias hasta tres días después y lo hizo aprovechando que tenía tiempo libre entre unos análisis clínicos y la visita al médico especialista que trata su enfermedad".
La Fiscalía ya había solicitado durante el juicio la absolución de Íñigo Errejón al considerar que no había pruebas de que hubiese propinado una patada al denunciante. "No tenemos ninguna prueba de cargo que quede totalmente acreditado que el señor Errejón ese día y esa hora le dio una patada al denunciante, queda acreditado que hubo una petición de foto pero no una agresión", dijo el representante del Ministerio Público durante el juicio.
Relatos similares
Además, durante el juicio, tanto Errejón como el denunciante hicieron un relato similar hasta el momento de la supuesta agresión. Dicho relato se basaba en que Errejón y los miembros de su equipo se marchaban de Lavapiés después del acto de cierre de campaña de las elecciones madrileñas de 2021 y tuvieron un conflicto con un hombre que, según creían, intentaba robarles. El denunciante, que volvía a su casa después de pasear al perro y estar con unos vecinos, vio al político y le solicitó una foto, algo a lo que se negó.
Desde ese momento, las dos versiones cambian por completo. El denunciante asegura que Errejón se negó a hacerse una foto con él y que incluso le pegó una patada en el estómago. Según el líder de Más País, el denunciante insistió, le llamó "rojillo" en alguna ocasión y él finalmente se marchó, dándose la vuelta para increpar al denunciante antes de abandonar definitivamente la zona. La supuesta patada, según reconoció el abogado del denunciante, no dejó lesiones, aunque llegó a afirmar que un médico de urgencias le dijo que podría haber desembocado en una evisceración.