La batalla judicial entre Juana Rivas y su exmarido Francesco Arcuri continúa. Ambos quieren retener la custodia de los hijos que tienen en común y, ante la gran relevancia de un caso (en el que se señalan condenas previas contra Francesco por violencia de género), se están incluyendo todo tipo de informes y documentos para acreditar una decisión final.
Entre esa documentación, destaca un informe firmado por la doctora en Psicología Ludovica Iesu, que ejerce como perito en el juicio y que cuenta con un trabajo de 32 entrevistas y pericias durante cinco meses, entre febrero y julio de este año.
Según el escrito, Rivas -condenada en España a cinco años de cárcel por sustracción de menores-, habría mostrado una "gran capacidad manipuladora" sobre sus hijos, con quienes ha "triangulado" el conflicto con su exmarido y con especial incidencia sobre el crío de 12 años, que estaría utilizando como "recipiente de las ansiedades maternas". Y considera que está utilizando a los menores únicamente con el interés de socavar la imagen de su exmarido.
Ante todo lo sucedido, la psicóloga cree que Juana Rivas "no es capaz de procesar sus experiencias", sufre una "emocionalidad lábil", tiene una "comprensión de la realidad deficiente" y es "totalmente inconsciente del daño psicológico generado a sus hijos apartándolos de su padre entre 2016 y 2017".
Cinco meses para realizar el informe
El caso de Rivas ha sido analizado minuciosamente, o así lo afirma la responsable del informe. Durante este trabajo de cinco meses (que en España se suele despachar en un par de días), se ha realizado una minuciosa reconstrucción del nacimiento, auge y destrucción de la relación entre Juana y Francesco.
Además, se ha analizado con un equipo de expertos todo el efecto que la situación ha provocado en los menores. Ha habido entrevistas con ambas partes, con los niños, con los padres, con familiares de ambos lados, con los profesores y pediatras de los niños, con psicólogos que ya les conocían... Incluso se han realizado varias dinámicas de juego de los niños con cada uno de sus padres para comprobar su reacción y la realidad de los malos tratos contra los pequeños que, según Juana, estaba realizando su exmarido. No se han encontrado pruebas, o al menos se señala en el informe elaborado por los expertos que analizan el caso.
Miguel Lorente, el perito que contrató Rivas para rebatir la conclusión de la psicóloga que investiga el caso, señala las sentencias por malos tratos y asegura que se han tergiversado todos los datos para beneficiar a Arcuri.
Sobre este último, la perito oficial también señala que, a pesar de sus "rasgos narcisistas y diifcultad para mostrar emociones, es un padre preocupado de las necesidades de sus hijos y dispuesto a escuchar", según concluye de los testimonios de los profesores, el pediatra y el educador en casa. Todos destacan, siempre según el escrito, que "en interacciones con su hijo, demostró habilidad para contener la agresión verbal, a pesar de la frustración que su hijo tiene".
El contacto con la madre, solo durante las vacaciones
Ante los argumentos expresados por la especialista, el informe recomienda que los niños se queden viviendo de manera estable con el padre, tal y como sucede en la actualidad.
En el caso de su madre, Juana Rivas, la perito apuesta por reducir los contactos entre los niños y ella únicamente a los días de vacaciones, por lo que la responsabilidad de la custodia de los menores recaería sobre el padre.
Rivas, condenada por sustracción de menores, ha presentado en el juicio a su hijo para que testifique contra su padre por unos presuntos malos tratos sufridos por el pequeño a manos de Arcuri.