Al rey Juan Carlos se le conocen multitud de amantes y líos amorosos pero, antes de conocer a Sofía de Grecia, el monarca también contó con dos mujeres de las que se sabe que marcaron su vida: una es María Gabriela de Saboya, con la que finalmente no se casó porque Franco prefería a Sofía. La otra es la condesa Olghina de Robilant, que ha fallecido ahora a los 87 años de edad.
Olghina, que se encontraba viviendo en la localidad italiana de Como, lugar donde ha fallecido, fue famosa en España por haber tenido una relación con Juan Carlos y por haber formado parte de la alta sociedad italiana.
Los dos se conocieron en verano de 1956 en Portugal, lugar donde muchas casas reales tenían fijada su residencia. Él tenía 18 años y ella 22 y su relación, aunque fue fugaz, fue también muy intensa, tal y como comentó la condesa en una entrevista en 2014 acerca de cómo se había enamorado del monarca:"Me enamoré como una colegiala. Era una relación alegre y simpática, sin compromisos".
Poco tiempo después, Juan Carlos tuvo que irse a hacer el servicio militar y, a pesar de que estuvieron mandándose cartas donde expresaban su amor, finalmente la distancia acabó terminando con la pareja y Juan Carlos optó por seguir con María Gabriela de Saboya, a la que también mensajeaba: "Sabes que estoy enamorado de ti como de ninguna otra chica hasta hoy. Pero sabes también que, por desgracia, no puedo casarme contigo. Debiendo, por tanto, escoger, creo que Gabriela es la más conveniente", le comentaba en un escrito a Olghina.
El destino quiso que finalmente no terminara con ninguna, puesto que el monarca conoció en un crucero organizado por la Familia Real griega a Sofía, que sí contó con el visto bueno de Franco para casarse con Juan Carlos debido a que pertenecía a una dinastía real, que era lo que el caudillo deseaba.
La vida de Olghina de Robilant
Tras su romance con "Juantito", como ella lo llamaba, no se volvieron a ver. Olghina se fue a vivir a Roma. Fue actriz y periodista y mantuvo relaciones con varias figuras destacadas de la época como Alain Delon, Ernest Hemingway, Truman Capote o Tony Curtis.
A los 25 años tuvo a su primera hija, cuyo padre aún se desconoce. Algo que saltó a los medios españoles cuando la prensa insinuó que el padre de esa hija era Juan Carlos. Sin embargo, ella siempre lo negó: "No quiero revelar el nombre del padre, un romano casado y con hijos, pero ante aquellos que lancen insinuaciones, él no se demoraría en reivindicar públicamente la paternidad de su hija".
En 1966, se casó con el pintor Antonello Aglioti, con quién tuvo otra hija, pero su matrimonio no duró mucho, poniéndole fin así en 1972. Tras ese momento, Olghina se dedicó a ser cronista social, aunque poco a poco fue perdiendo relevancia y poder adquisitivo.