Los adolescentes de hoy en día tienen más probabilidades de sufrir sobrepeso que sus homólogos de hace 25 años. Este dato revelador viene de la mano de un estudio realizado por la Escuela de Kinesiología y Ciencias de la Salud de la Universidad de York, en Toronto (Ontario).
Podemos pensar que esta noticia deriva de los malos hábitos alimenticios que inundan nuestra sociedad, pero nada de eso, según el informe, los jóvenes de hace cuarto de siglo que tenían unos hábitos alimenticios y de ejercicio físico similares a los de hoy en día.
Además, el propio documento señala que aunque el consumo de calorías habría aumentado un 14% estos últimos años, el de grasas se habría reducido entre un cinco y un nueve por ciento. Así mismo, Occidente vive en plena cultura de culto al cuerpo, la cual ha provocado que los jóvenes incrementen su actividad física entre un 50% y un 120% respecto hace 25 años. Entonces, ¿qué está fallando?
Posibles causas
Aunque no se ha encontrado una base científica que ratifique las siguientes causas, los médicos que han colaborado en el estudio afirman que, probablemente, la multiplicación de la cantidad de químicos agregados a los alimentos sea uno de las principales motivos de este problema.
No obstante, también existen otros indicios, como el incremento del consumo de medicamentos o una mutación en los microorganismos que habitan en nuestro cuerpo. Esta alteración podría estar relacionada con la acentuación de los tratamientos hormonales a los que se ven sometidos la mayoría de los animales que forman parte de nuestras dietas.
Consecuencias
Según dicho estudio, en la actualidad uno de cada cuatro adultos es obeso y casi el 38% tiene sobrepeso. En el caso de los más jóvenes, un tercio de los que tienen entre 2 y 17 años tienen un peso por encima del recomendado. Como consecuencia de todo ello, se ha constatado un aumento de las cirugías destinadas a reducir el peso.
Además, se desprende el desenlace más grave, la esperanza de vida de los más jóvenes se puede ver reducida en unos 15 años. Reducción acompañada de otros problemas de salud como la diabetes, la hipertensión arterial, problemas respiratorios o inclusive trastornos psicológicos y afectivos.
En el caso de España, según la Sociedad Española de Cirugía y Obesidad y de las enfermedades metabólicas (SECO) los adolescentes de nuestro país pesan unos 10 kilos más que hace 25 años.