El debate sobre la depilación en las mujeres sigue siendo un tema presente, mientras que unos defienden que cada uno debe hacer lo que quiera con su cuerpo, otras personas se dedican a insultar y denigrar a las mujeres que deciden no retirar su vello facial y corporal.
El vello corporal es algo completamente normal y natural, tanto en el cuerpo de los hombres como el de las mujeres. A estas últimas, debido principalmente a los roles de género, están acostumbradas como norma a depilarse la mayoría de partes de su cuerpo. No se trata de una cuestión de higiene, ya que no tiene nada que ver con el olor o la sudoración.
Por ello, cada vez hay más mujeres que se animan a dejar las tediosas prácticas de depilación, que en la mayoría de ocasiones, suponen gasto, dolor y mucha incomodidad al realizarlas, para aceptar sus cuerpos al natural. Se trata de una tendencia que se está extendiendo cada vez más gracias a las redes sociales, y a las mujeres que deciden servir de ejemplo para que otras se atrevan a dar el paso, si es lo que desean.
La historia de Martina Díaz
Martina Díaz es una joven argentina que decidió compartir la historia de su vello corporal en las redes sociales, de esta manera, se ha llegado a convertir en una 'influencer' y activista, que trata los temas de la depilación en las mujeres. Debido a un síndrome, Martina siempre ha tenido mucho pelo en la cara y en el cuerpo, lo que en un principio le causaba mucho complejo.
''Hace un año me di cuenta que no quería depilarme más", afirmaba, se empezó a dar cuenta "de todo lo que había sufrido por los pelos y me pregunté qué pasaría si me los dejaba. Me chocaba que sea tan condenado en mujeres y tan aceptado en hombres algo que es exactamente lo mismo'', explicaba en su TikTok, donde le preguntaban por qué ya no se depilaba.
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"Esto no tiene sentido, qué estamos haciendo", continúa diciendo, y explica cómo empezó a dejar de depilarse: "Primero empecé a espaciar las depilaciones. Me dejé crecer, empecé a mostrar en redes y me encontré con un montón de gente a la que le inspiraba y me contaban sus experiencias de haber sufrido en la adolescencia por los pelos, y dije 'no, esto tiene que cambiar'", denunciaba.
Además, la joven ha trabajado como modelo en múltiples ocasiones, y cuando se dejó de depilar, admite que se alejó un poco del mundillo por tener unas normas que no la iban a aceptar como era. Martina explica que más adelante, otro tipo de marcas más "disruptoras" contactaron con ella, y se alegra de que cada vez haya más diversidad y aceptación para todo tipo de cuerpos. Mientras tanto, ella continúa publicando en las redes sociales, en TikTok tiene casi 300 mil seguidores.