"Hacéis que os suicidáis para llamar la atención. Teatreras". Tan solo una semana antes de que José Luis Abet Lafuente asesinase a su ex mujer, su ex suegra y su ex cuñada, su odio hacia las tres mujeres quedó patente en sus mensajes.
Las amenazas no se producían únicamente a través de mensajes de texto, sino que los insultos y chantajes eran constantes. La ex mujer del asesino, Sandra Boquete Jamardo, vivía atemorizada, y así lo corroboran sus compañeros de trabajo en la fábrica de STAC, dedicada a la fabricación de productos del sector del aluminio. Algunos de ellos afirman, incluso, haber sido testigos de como el hombre se presentaba en la empresa para comenzar una discusión en público.
Los vecinos del municipio de Valga también han sido testigos durante años del temor constante al que el asesino sometía a la que fue su mujer. De esta forma, aseguran que mantuvieron graves conflictos con el detenido y que los enfrentamientos tenían lugar frecuentemente.
Según recoge El Español, Ramón Eiras, que compartió aldea con José Luis Abet y Sandra Boquete, ha explicado como el hombre comenzó a insultar a una mujer de 92 años en plena calle, o como intentó atacar a otro vecino con un hacha, aunque finalmente no se produjera ningún daño.
Cansada de vivir con miedo, Sandra obtuvo los papeles del divorcio en enero. Pero eso no fue suficiente para que cesaran los insultos y vejaciones. Al contrario, el autor confeso del crimen mostró su agresividad en un mensaje con el que respondía a la publicación de la que era ya su ex mujer en Facebook.
El mensaje de odio de José Luis a su ex mujer
"Pero qué perdonas, que me metiste un crédito de mucho 'carallo'. Tú y tu asesoría, que erais las que llevabais todo el papeleo y ahora vas de víctima. E incluso falsificabas mi firma en el banco para cobrar los cheques mientras yo estaba fuera, y la casa a nombre de tus padres, y como me negué a que no me pusieran en el catastro vas y me pides el divorcio. Y encima no me dejas ver a mis hijos. Ladrones, y después vais a misa. Dejad de ir de víctima. Que ya cansaís. Ladrones. Y te lo pongo públicamente, a mí no me manchas más mi nombre. Vais de listas. Sois mala gente, que haces como tu prima. Hacéis que os suicidáis para llamar la atención. Teatreras."
El estremecedor mensaje, con el que José Luis Abet pretendía culpabilizar a Sandra de todos sus problemas y exponer su intimidad en público, se produjo tan solo una semana antes de que el hombre cometiera el triple asesinato que tuvo lugar en el municipio de Valga, en Pontevedra.
Ahora, José Luis Abet tendrá que elegir prisión después de que la jueza que investiga el triple crimen machista considerara que el asesino confeso tiene que cumplir prisión provisional, comunicada y sin fianza.
Los tres delitos de asesinato que se le imputan podrían traducirse, según confirman fuentes oficiales de la Xunta de Galicia, en una posible condena de prisión permanente revisable.
