Jorge Palma, el hombre que se ha presentado en un cuartel de la Guardia Civil para confesar el asesinato de Marta Calvo, ha reconocido que descuartizó a su víctima y posteriormente lanzó sus restos en varios contenedores. Se trata del mismo lugar en el que se investiga, desde hoy, la desaparición de otra joven, identificada con el nombre de Wafa, cuya pista se perdió hace tres semanas a diez kilómetros del lugar del suceso, aunque sus familiares han denunciado ahora.
El hombre se ha presentado durante la madrugada de este miércoles 4 de diciembre en la comandancia de la Guardia Civil de Carcaixent (Valencia), a pocos kilómetros del lugar en el que se perdió la vista a la joven el pasado 7 de noviembre.
Durante los últimos días, el nombre de Jorge Palma había surgido como principal sospechoso. Los investigadores consideraban con fuerza que la muerte de la joven se había producido el mismo día de su desaparición en la vivienda donde se encontraron. Ese mismo día, uno de las últimas comunicaciones de Marta fue un mensaje de WhatsApp a su madre con la ubicación en la que se encontraba.
A partir de entonces, la madre de Marta no volvió a mantener ningún tipo de comunicación con su hija, lo que le llevó a presentar una denuncia ante la Guardia Civil que dio comienzo a la investigación.
Sin embargo, los agentes no consiguieron localizar a Jorge. Incluso, en el grupo de investigadores, surgió la posibilidad de que el acusado hubiese huido a Italia, donde había vivido una temporada y guardaba antecedentes por tráfico de drogas.
Además, había otra serie de indicios que habían levantado la alarma entre los investigadores. Entre ellos, que Jorge Palma había entregado su vehículo a un amigo para que se deshiciera de él y el fuerte olor a lejía que se había registrado en su casa de la localidad de Manuel (en la provincia de Valencia).
Recorrió 100 kilómetros antes de su desaparición
La desaparición de Marta Calvo se produjo oficialmente el pasado 7 de noviembre, después de recorrer más de 100 kilómetros desde su vivienda hasta la localidad de Manuel, donde reside Jorge Palma.
Cuando llegó y como hacía habitualmente, cogió su teléfono, abrió la aplicación de WhatsApp e inmediatamente le envió la ubicación, como acostumbraba a hacer en otras ocasiones.
Las autoridades no han encontrado más conexiones desde su teléfono móvil después de las seis de la madrugada. Tampoco en las redes sociales, donde era muy activa interaccionando y publicando información.
Extrañada por la repentina desapareción de su hija, la madre de Marta Calvo se presentó por sorpresa en casa del ahora asesino confeso. Y allí se lo encontró: él le dijo que no conocía a su hija. Este comentario bastó para interponer la denuncia que ahora se juzga.
Otra joven desaparecida
El caso de Wafa, la joven de 19 años desaparecida a diez kilómetros del lugar en el que se perdió al vista de Marta Calvo, se ha anunciado la misma mañana en que Jorge Palma ha confesado el asesinato de Marta.
Cuando se dio a conocer la noticia de esta desaparición, los agentes aún mantenían la hipótesis de que Jorge Palma había huido a Italia. Con su entrega, aún no hay constancia de que hayan cambiado de versión, pero en principio no encuentran vinculación entre ambos casos.
La pista de Wafa se perdió el pasado 14 de noviembre, una semana después de Marta Calvo. No se presentó denuncia entonces, por lo que no se inició una investigación hasta ahora, cuando sus allegados se han acercado a una comisaría.
Mientras tanto, los investigadores continuan interrogando al principal acusado del asesinato de Marta Calvo y mantienen una investigación oficialmente separada en el caso de la otra joven de 19 años.
