Jorge Ignacio Palma, acusado del asesinato de Marta Calvo, ha declarado en la decimoctava sesión del juicio con jurado popular en la Audiencia de Valencia. Allí ha defendido que siempre ha dicho "la verdad" y ha asegurado que "antes del caso de Marta, a mí nadie me había denunciado ni se me estaba investigando".
Palma ha respondido a las preguntas de su abogada y del jurado, pero no a las de las acusaciones. Está acusado de la muerte de Marta Calvo, pero también de otras dos mujeres y otros ocho casos de abusos sexuales con la introducción de cocaína de alta pureza en los genitales de sus víctimas sin consentimiento.
La letrada ha sido directa a la hora de preguntarle sobre estas cuestiones: "¿Usted mató a Arliene, a Lady Marcela y a Marta Calvo?". Palma ha respondido: "Absolutamente, no", ha repetido en varias ocasiones. Además, ha incidido en que contrató los servicios de varias prostitutas, pero que no sabe si son las denunciantes, ya que comparecieron detrás de un biombo. "No reconozco a ninguna de esas personas. Para empezar, no sé quiénes son", ha señalado.
Marta Calvo
Sobre Marta Calvo, Jorge Ignacio Palma ha asegurado que la contrató durante "varias horas" y ha añadido: "Para mi cumpleaños tuve la desafortunada idea de pasar la noche acompañado". Después de mantener relaciones en la casa alquilada del acusado en la localidad valenciana de Manuel, Calvo no se encontraba bien y se duchó, según su testimonio, tal y como recoge ABC.
"Nos acostamos y cuando me desperté, veo que tiene un gesto un poco extraño", es el relato que expone Palma, que asegura que inmediatamente le tomó el pulso. "No respiraba y se me cayó el mundo encima [...] Me sentí muy desgraciado, quería pasar un buen rato y mira lo que me encuentro", señala.
Asegura que, en ese contexto, "pienso en suicidarme, la verdad", pero que al día siguiente llegaba su madre y quería despedirse de ella, y que por ese motivo no llamó al 112. Llevó a Marta al baño, "cogiéndola por el pecho y arrastrándola hacia atrás porque estaba rígida".
"Si salía con un bulto y lo metía en el coche, se darían cuenta", ha afirmado sobre los vecinos, algo que no vio "prudente". Este es el motivo que esgrime para descuartizarla y arrojar sus restos en dos contenedores de Alzira y uno de la localidad de Silla. "Si yo conté lo que ocurrió fue para hacer paz con mi conciencia, para que la familia supiera lo que había ocurrido y para que la encontraran. Les pido perdón".
"Hice algo terrible"
Jorge Ignacio Palma niega haber asesinado a Marta Calvo, pero sí reconoce, por tanto, ser el autor de su descuartizamiento, algo que reduciría enormemente su pena. "No le quité la vida, pero sí hice algo terrible", ha asegurado.
La familia busca desesperadamente localizar el cuerpo de Marta Calvo, algo a lo que Jorge Palma no ha dado todavía respuesta. Sobre ello ha insistido un miembro del jurado: "Yo no tengo ánimo de martirio, ni de maquillar los hechos. Conté lo que ocurrió. Ojalá hubiera hecho otra cosa. No puedo luchar contra un Estado. Sabían todo", ha respondido sobre el trabajo ejercido por las autoridades.
Palma también ha justificado que arrojó las bolsas y sierras en diferentes contenedores de basura porque, cuando ya había hecho varios viajes a Alzira, donde nadie le conocía, decidió ir a otro lugar cercano, Silla, donde tampoco nadie conocía su identidad.
El acusado también ha justificado que tuviera tantos teléfonos, que llegó hasta seis dispositivos (que tiró a la basura antes de entregarse) en la necesidad de acumular ofertas y promociones. En el tiempo que pasó hasta que se presentó en el cuartel de Carcaixent ha asegurado que "no hubo comunicación con mi madre" y que colaboró, a pesar de que no declaró hasta el juicio.
Preguntado por el motivo por el que mintió a la madre de Marta Calvo, Marisol Burón, cuando ella se presentó en su vivienda de Manuel preguntando por el paradero de su hija, Jorge Ignacio Palma se ha visto acorralado por el jurado: "Yo no sabía que era la madre. Pensaba que era la madame del lugar en el que trabajaba [...] Me habla por el nombre y no me acordaba", ha asegurado, pero ha reconocido que "no le iba a decir qué había pasado".
Palma también ha reconocido la celebración de fiestas blancas, con uso de cocaína: "Llevo droga para consumirla yo y la chica no se escandaliza. La chica te proporciona cuando se termina la tuya y ella también consume". Además, ha negado que cubriera el cuerpo de las mujeres con cocaína, que compraba a "terceras personas". "Yo llevaba medio gramo o un gramo". Además ha negado que adulterara las bebidas de las prostitutas con las que mantenía relaciones con ninguna sustancia.