Bastan unos pocos hombres musculados, una piscina, un pequeño bañador -a decir verdad, minúsculo- y unos rótulos estratégicamente colocados para hacer volar la imaginación de los espectadores de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro durante las competiciones de salto sincronizado.
Añadamos a esta mezcla, claro esta, un poquito de mente sucia en los televidentes. Lo cierto es que si estás con la calma en tu casa, enciendes la tele y te encuentras con esto:
Es posible que tu calenturienta mente se dispare mínimamente. El efecto visual que provocan los faldones, tapando justo el bañador, hace que parezca que los atletas están desnudos. Ya ocurrió en 2012, cuando la imagen del británico Tom Daley en la ducha dio la vuelta a todo Twitter y todavía hoy se recuerda:
It's so weird for these Olympic divers to dive in the nude. Bravo to NBC figuring out a way to censor the nudity. pic.twitter.com/bisSgDZtsw
? Sean (@Seanye_West_32) 9 de agosto de 2016
Era de prever que los faldones de Río 2016 también hiciesen de las suyas y nos hiciesen dudar si estamos viendo la competición de saltos sincronizados masculinos o una película porno gay.
This is basically porn oh my god!!! ?? #Rio2016pic.twitter.com/bAfmFTr4k7
? Rory Mac (@rorymacfar) 8 de agosto de 2016
Toda la red se llenó de capturas tras la competición de este lunes.
Y, a decir verdad, no podemos culpar a los usuarios que las compartieron.
Lo cierto es que la situación estratégica de los rótulos deja poco lugar a la imaginación. Los momentos en los que los atletas salen del agua y se duchan o intercambian impresiones mientras su puntuación aparece sobreimpresa en pantalla son los favoritos de gran parte del público.
En ocasiones, los faldones están colocados con más gracia.
En otras, lo cierto es que no. Pero nuestra imaginación sigue siendo igual de calenturienta y le vale lo mismo.
Otras veces, son los propios atletas los que le hacen el trabajo a los grafistas de Río.
La toalla es un rótulo analógico.
También hay imágenes que, simplemente, hablan por sí solas.
Nada que añadir.
Quizás el hecho de que haya un jacuzzi por medio no ayuda a enfriar los ánimos.
Los mexicanos fueron los que más afición le mostraron al jacuzzi. Nada más terminar, corrían a meterse en las aguas cálidas.
Quizás es porque tenían muchas cosas que decirse.
Las duchas son otro de los lugares clave.
Tanto, que no hacen falta ni rótulos.
Bromas aparte, el salto sincronizado masculino es una de las disciplinas en las que los atletas demuestran más su deportividad.
Y la importancia de confraternizar.
Al fin y al cabo, no hay nada de malo en que dos hombres se den cariño y celebren sus victorias deportivas con un abrazo.
¡Todos a celebrar al jacuzzi el éxito de los JJOO un año más!
Y no olvidéis que ducharos por parejas es una buena manera de ahorrar agua.