El pasado 19 de diciembre, 'OT 2018' decía adiós. Después de una edición donde no se cumplieron todas las expectativas pese a un gran éxito audiovisual online, las audiencias dieron a entender que el gancho de la generación actual no había alcanzado al fenómeno del año anterior. Un día después de la victoria de Famous en la final, la rueda de prensa junto al ganador nos dejaba el titular del día en boca de Toni Sevilla, jefe de contenidos de la pública: "El formato debe descansar".
Ante semejante afirmación, muchos pensaron que no habría 'Operación Triunfo' en 2019, asumiendo que el formato tiene gancho y ha vuelto con la puerta grande, pero que quizá precisaba de una campaña en barbecho para renovar contenidos, afrontar cambios y volver a crear ese hype tan necesario en la televisión actual.
Sin embargo, "donde digo digo, digo Diego". El pasado día 11 de enero, el Director de TVE, Eladio Jareño, soltaba una nueva bomba al ser entrevistado en Fórmula TV: "En principio, el formato no va a descansar", reconociendo que la duda es "ver cuándo hacemos la nueva edición". Jareño entiende el curso televisivo como un tránsito desde septiembre (mes en el que comenzaba precisamente 'OT 2018') y junio, la duda queda en ver si el talent tendrá recorrido en 2019 o tendrá su nueva edición ya entrado 2020.
Jareño también ha reconocido que "no hay que precipitarse" y que es necesario "cuidar y mimar el formato" y ha hablado de la importante carga emocional que supone el programa como para dosificarlo en el tiempo, un hecho que a las claras no se hizo entre las ediciones de 2017 y 2018.
Entonces... ¿Es beneficioso o no una tercera edición consecutiva de OT en la pública?
Los tiempos televisivos no son los naturales
Mucha gente tiende a preguntar si habrá 'OT 2019', y lo cierto es que no lo sabemos. Lo común y normal sería ver a TVE guardando el formato hasta inicios de 2020, o al menos apurando el 2019 para su estreno, tal y como sucedió en 2017, cuyo inicio tuvo lugar allá por finales de octubre.
Siempre con la cortapisa de valorar si el talent será o no una preselección a 'Eurovisión', lo que forzaría su final hasta enero o febrero, a más tardar, quizá la mejor estrategia pueda ser la de hablar de un 'OT 2020', aunque eso lleve apretar tiempos para llevar el formato a finales de temporada prácticamente.
Bajo esta teoría y a sabiendas de que ni la televisión ni la productora se plantean fechas de inicio aún, según Jareño, para el espectador parecería que durante 2019 no hubo 'OT', un hecho que favorecería para dar margen a la gira de la edición de 2018, ir escalonando las incorporaciones al mercado musical de los concursantes, y sobre todo generar expectación respecto al formato. Acercar más la fecha de finales de año o inicios del siguiente llevaría a un proceso similar al vivido en 2018, donde el espectador sin haber dicho adiós a los triunfitos del año anterior ya tendrían una nueva camada en su televisor.
Convivir con la industria musical
'OT' se ha convertido en un formato que nutre de primera mano a la industria musical española. Nombres como los de Aitana, Alfred, Miriam Rodríguez, Lola Índigo o Ana Guerra son ya primeras espadas de la música de radiofórmula en la actualidad, y no es de extrañar que algún nombre de la camada de 2018 se cuele fuerte en listas de ventas en los meses venideros.
Por ello, a sabiendas de que el formato convive de la mano de Universal como sello, y de la venta de un producto musical que consigue hoy día vender en físico y mover masas, darle tiempo al formato es la mejor manera de asentar a las nuevas caras que al salir del concurso llegan a la industria musical.
En un talent como Operación Triunfo, de marcado éxito entre los más jóvenes, es fácil que el fan cambie una carpeta por otra, y un cantante por el del año siguiente fácilmente, por ello airear el formato es más que necesario. Si de aquella 'OT 2' de 2002 nos cuesta acordarnos, que nos digan que se nos quedó en la retina del 'OT 3' de un año después.
La expectación es necesaria
Por último, siempre es interesante echar una mirada atrás para ver como volvió Operación Triunfo a TVE hace ya dos años. Luego de emitir con un éxito apabullante el documental 'OT: El Reencuentro' e incluso planear un par de conciertos con aquella generación de 2001, el hambre por el formato era tal que 'OT 2017' reventó todos los récords en audiencia digital y cumplió más que de sobra con la audiencia tradicional.
Sin embargo, de cara a 2018 el consumidor tenía intriga por ver el concurso de nuevo, pero ya estaba saciado. El atracón de la generación de 2017 le había colmado por completo, y junto a ello el perfil de concursante ya sabía a lo que iba a la academia. ¿Cuál es la solución a todo esto? Darle tiempo al formato.
En principio, siempre que hemos seguido 'OT' hemos tenido una tercera edición consecutiva, aunque sus datos siempre han terminado por ser menores. Ahora habrá que ver el planteamiento de una TVE que bien deberá lavar la cara al programa para no caer en errores del pasado. De momento, es tiempo de estar expectantes y sobre todo cerrar un 'OT 2018' que todavía tiene recorrido.