Parece que la historia se repite y ella lo vio venir. Ese es el mensaje que, subliminalmente, Susana Alímivna Jamaladínova, más conocida como Jamala, reivindica desde hace semanas con su tema '1944'."Extraños vienen, llegan a tu casa, os matan a todos y dicen que no son culpables", así rezan las primeras palabras que entona cuando se sube a un escenario a interpretar esta pieza musical, una balada étnica y folk, de tintes épicos. Nadie imaginó que ahora, seis años después de llevarse los votos de toda Europa en Eurovisión, cobraría tanto sentido. Hemos podido saber cómo se siente de primera mano, tras encontrarnos con la ucrania en la Barcelona Eurovision Party 2022.
La canción con la que Ucrania conseguía su segunda victoria en Eurovisión ha llegado lejos, especialmente su letra, que habla sobre la deportación de los tártaros de Crimea a manos de la Unión Soviética, en plena Segunda Guerra Mundial. Los medios de comunicación rusos pusieron el acento en esta cuestión y acusaron a la cantante de haber sido crítica con la anexión de Crimea y la contienda en el Donbass, territorio que Putin ha tenido en el punto de mira desde hace años.
"Lloro la canción"
"Cada vez que me llaman para cantar '1944', lloro la canción, no la canto". Así es como la propia cantante de 38 años, madre dos niños pequeños, relataba ante los medios de comunicación el sentimiento, de desesperación y de incertidumbre, aunque con bosquejos de esperanza, que actualmente guarda en su interior y que expresa, como un grito de auxilio, en representación del pueblo ucraniano. Lo hace en cada viaje y parada musical que ha realizado desde que estalló la guerra que acontece en su país tras la invasión de Putin: Rumanía, Alemania, Reino Unido, Polonia, Lituania, España... Europa responde a la llamada de socorro del país que hace tan solo cinco años acogía una de las citas musicales más importantes del mundo, donde daba la bienvenida a (casi) todo el continente. Menos a Rusia.
Han pasado ya unas cuantas semanas desde sus actuaciones en Bucarest y Berlín, las dos primeras paradas que realizó tras dejar atrás Kiev. Luce algo cansada, aunque con más aplomo que entonces. Se muestra agradecida, aunque especialmente con la comunidad de fans de Eurovisión, a quien no paró de dar las gracias durante todo el encuentro con la prensa asistente a la Barcelona Eurovision Party 2022.
"Un ataque a los valores de toda Europa"
Si bien, hasta febrero de 2022, el conflicto entre los Gobiernos de Zelenski y Putin tras la invasión de la península de Crimea en 2014 parecía estable, aún latente, hoy en día es "un ataque a los valores de toda Europa". Así lo considera Jamala, ahora refugiada de guerra. Tras el estallido, la entrada de los tanques y el acecho de los misiles, huyó de su país con sus dos hijos y, si bien inicialmente puso rumbo a Rumanía, finalmente aterrizó en Turquía, donde reside actualmente junto a su hermana y los pequeños.
"Rusia ha roto todas las reglas, no solo las musicales. No es solo una guerra de Ucrania contra Rusia, en algún lugar de nuestro país, sino contra toda Europa. El continente debe estar unido", defiende. Asimismo, también quiso hacer una comparación con la situación inicial que el mundo atravesó tras la aparición de la pandemia a causa de la COVID-19, que pone como ejemplo para que el mundo no mire hacia otro lado guerra: "Cuando comenzó, pensábamos que estaba lejos y no iba a llegar, solo en China, pero no. Estamos todos en el mismo barco".
La cantante se preparaba para sacar a la luz nueva música y un nuevo álbum en el mes de mayo, sin embargo, este sueño está lejos de ocurrir. Como ya avanzamos, tuvo que dejar a su marido atrás, debido a la ley que obliga a los hombres entre 18 y 60 a servir a las Fuerzas Armadas en caso de conflicto bélico. Sin embargo, su razón es ahora su verdad y su realidad: conseguir que el mundo no dé la espalda ante lo que acontece y conseguir toda la ayuda humanitaria posible a través de donaciones. Tan solo en Alemania, durante su visita a la final nacional del país para Eurovisión, se recaudaron casi 70 millones de euros.
La que fuera nombrada artista honorífica patria tras su triunfo en Estocolmo en 2016 acudió a la llamada de Barcelona el pasado fin de semana, y también del resto de España, pues próximamente lo hará en Madrid, ya que confirmó su presencia en la PrePartyES 2022, así como en un programa especial que Radio Televisión Española emitirá en las próximas semanas. No obstante, también se muestra también activa ante los ojos de todo el planeta a través de sus perfiles en redes sociales, especialmente en Instagram, donde evidencia su apoyo al discurso de Zelenski en todo momento.
El conflicto a través de la música: Jamala ya ganó a Rusia
Eurovisión fue y sigue siendo su principal bastión, o al menos su mejor arma. Su mensaje ya traspasó fronteras hace más de un lustro. Lo cierto es que cuando Jamala ganó Eurovisión, Rusia se quedó cerca de conseguirlo y ambos países libraron una tensa batalla musical. Finalmente, la emoción, el magnetismo y la elegancia de Alimivna consiguieron que Ucrania trajera el micrófono de cristal de vuelta a Kiev en 2017. Jamala regresó a casa como una heroína y desde entonces ha ocupado las sillas y los sillones de los principales programas de televisión musicales del país como experta musical. Sus raíces han estado siempre muy presentes en todo lo que toca, se declara abiertamente musulmana y defiende a capa y espada sus orígenes tártaros y armenios. La música siempre ha corrido por sus venas, ya que comenzó a grabar sus primeras canciones con tan solo 9 años.
Durante los canutazos, Jamala no solo apoyó la descalificación de Rusia de Eurovisión 2022 como una de las más obvias sanciones hacia el país beligerante en este conflicto latente, sino que también defendió la participación del grupo Kalush Orchestra con el tema 'Stefania' como abanderados de Ucrania en el evento, que tendrá lugar en Turín (Italia) en el mes de mayo. El viejo continente se volverá a unir a través de la música, el mismo propósito con el que nació hace casi 70 años.
Su sólido apoyo a Kalush Orchestra
"Es un buen tema, aunque no entiendas la letra, entiendes que es como bailar y llorar al mismo tiempo", opinaba sobre la canción que el grupo interpretará en la primera semifinal del festival. Los ojos estarán puestos en ellos, a quienes la Unión Europea de Radiodifusión (UER) ya ha permitido participar, puedan o no viajar al país mediterráneo, aunque para cumplir con dicho cometido, la cadena pública ucraniana Suspilne tenga que emplear la performance de su final nacional.
Por otro lado, la que volviera a ser jueza de esta preselección, más conocida como 'Vidbir', echó balones fuera y no se mojó en dar su opinión en torno a lo ocurrido con la ganadora del concurso, Alina Pash, que consiguió el apoyo del televoto con su tema 'Shadows of Forgotten Ancestors'. Esta balada épica con tintes folk, que toca también el rap, no pisará el escenario del PalaAlpitour. Una pena, y una gran pérdida, ya que Pash habría sido una firme candidata a la victoria dada la coyuntura. Véanlo ustedes.
Si bien la candidatura de Pash guardaba muchas semejanzas con la de la propia Jamala en Eurovisión 2016, incluso en lo más profundo de la letra del tema, la artista ha atravesado una situación similar a la que otra famosa artista en el país, Maruv, le toco vivir en 2019, cuando su tema 'Siren Song' también estuvo exento de participar en Eurovisión, debido al paralelo desarrollo de la carrera musical de la cantante en Rusia. Desde entonces, Ucrania se ha mostrado reticente a permitir la participación musical en Eurovisión, en representación del país, de cualquier artista que haya pisado la tierra de los zares.
'Shadows of Forgotten Ancestors' fue finalmente reemplazada por 'Stefania', de Kalush Orchestra, que había conseguido la medalla de plata, debido a la renuncia de la cantante tras las presiones ejercidas por el ente público ucraniano. Al parecer, Pash habría falsificado un documento en el que negaba haber entrado a Crimea hace algunos años a través de la zona ocupada por Rusia, y no desde la propia Ucrania, totalmente prohibido por las autoridades locales. Los segundos clasificados, aceptaron la propuesta de la televisión pública ucrania, y por ahora lideran las casas de apuestas y pronósticos. Ucrania está preparada para llegar a lo más alto de la tabla... ¿lo estará Europa?