El conflicto en la Franja de Gaza ha dejado 230 muertos en la Franja de Gaza frente a los 12 fallecidos en Israel. A ello se suman los destrozos que se han producido dentro del territorio gobernado por el movimiento Hamás, entre ellos, la destrucción de una torre que albergaba medios de comunicación internacionales como AP o Al Jazeera, una búsqueda de silencio mediático para los palestinos, una destrucción de objetivos de Hamás para Israel.
Israel, que ha neutralizado prácticamente todos los ataques provenientes de Gaza con la denominada Cúpula de Hierro, ha mostrado una cara desigual en este conflicto que, once días después, parece encontrar su primera tregua. Una escalada bélica que estaba poniendo en crisis su propia imagen internacional e incluso en duda a algunos aliados internacionales sólidos durante años.
El alto el fuego, por tanto, ha entrado en vigor este viernes 21 de mayo a las 02:00 hora local (23:00 GMT del jueves). El pacto es por una tregua indefinida, por lo que no hay una fecha para retomar la escalada y se quiere poner fin a la situación actual.
Por el momento, dicha tregua se está cumpliendo, al menos, según los partes emitidos por ambos bandos. El Ejército israelí así lo ha certificado, ya que no ha emitido nuevas alarmas antiaéreas en las comunidades israelíes colindantes a la Franja desde las 01:51 hora local. Tampoco ha habido nuevos bombardeos israelíes en Gaza.
Acuerdo incondicional y el papel de Egipto
El acuerdo, entienden ambas partes, comprende la obligación de abandonar los ataques mutuos, especialmente aquellos dirigidos a bombardear territorios. Israel, que no suele comentar este tipo de rúbricas, ha hecho una excepción: la oficina del primer ministro, Benjamin Netanyahu, ha acordado "aceptar la propuesta de Egipto de un alto el fuego mutuo y sin condiciones". El portavoz de Hamás, Hazem Qassem, afirmó por su parte que "había garantía de mediadores" para una "tregua mutua y simultánea".
Efectivamente, el papel de Egipto ha sido destacable, puesto que ha sido quien ha lanzado la propuesta que finalmente ha salido adelante y también ha ejercido como mediador, en parte gracias a su influencia en la Franja.
Dentro del papel que ejerce como mediador, El Cairo enviará en los próximos días a dos delegaciones de seguridad a Tel Aviv (Israel), así como a los Territorios Palestinos. El objetivo pasa por realizar un seguimiento y vigilancia del desarrollo de la tregua.
Dicha tregua, a pesar de las exigencias de Hamás, no incluirá ninguna referencia a los desalojos de familias palestinas en Jerusalén Este o las incursiones en la Explanada de las Mezquitas. Fueron los desencadenantes de la escalada bélica de los últimos días.
El factor internacional
La presión internacional también ha sido clave, sobre todo, a medida que la destrucción de la Franja de Gaza y la pérdida de vidas humanas iba en aumento. El deterioro de la imagen internacional del estado de Israel también ha sido palpable durante los últimos días.
A pesar de todo, Netanyahu había rechazado dos propuestas de tregua, insistiendo en que los ataques continuarían "el tiempo que fuese necesario", hasta que Israel alcanzara sus objetivos. Es altamente probable que haya dado por muertos a altos cargos de Hamás antes de conceder la tregua.
Cisjordania también ha sido otro punto en contra, con el temor a un levantamiento en contra, así como de los árabes de origen palestino que viven dentro de Israel y que podrían haberse rebelado contra las acciones de su propio gobierno.
Más lejos, otro actor internacional, Estados Unidos, finalmente no ha cometido la osadía de abrir un frente con su gran aliado Israel, pero sí que ha abierto la puerta a "una significativa desescalada bélica" inmediata, como pidió el presidente Joe Biden. Por su parte, el enviado especial estadounidense para Oriente Medio, Tor Wennesland, también ha movilizado los contactos para propiciar la tregua.
Ha habido una intensa actividad diplomática en la región durante los últimos días. La Asamblea General de la ONU también convocó una reunión para presionar a un acuerdo que se celebró, precisamente, durante el anuncio del cese de las hostilidades.
Ambos se dan por satisfechos
A pesar del elevado número de víctimas y la destrucción que ha vivido la Franja de Haza, ambos consideran que han salido reforzados de todo lo sucedo. El portavoz de Hamás, Hazem Qassem, afirmó en un comunicado que "la resistencia demuestra en todos sus pasos que es el escudo del pueblo y e más capaz de proteger los fundamentos de la causa palestina".
Uno de los líderes de esta organización, Mushir al Masry, valoró el alto el fuego como "una huída del campo de batalla" por parte de Israel, así como celebró la "saga de victorias" de Hamás en este último enfrentamiento, en el que se han "impuesto nuevas reglas".
El jefe del Estado Mayor de Israel, por su parte, destacó "los importantes logros" del país "en la operación, algunos de los cuales no tienen precedentes", según destacó en un comunicado. Mientras tanto, el alto el fuego sigue adelante, de manera indefinida.