Isabel Peralta se hizo conocida por su discurso en homenaje a la División Azul, donde aparecía con el brazo en alto, saludo fascista, camisa azul y proclamas antisemitas. Tenía 18 años entonces y culpaba a los judíos de todos los males actuales que veía en el mundo. Por estos hechos, la fiscalía pidió que se le imputase un delito de odio.
Su discurso también llegó fuera de España, donde grupos neonazis de todo el mundo la ensalzaron. Y, ahora, uno de los más violentos, Der III Weg, (El tercer sendero o El tercer camino) la ha invitado a Alemania para "completar su formación".
El pasado 7 de septiembre, Peralta cogió un avión en Madrid con destino a Dusseldorf, capital del lander de Renania del Norte-Westfalia, uno de los lugares en los que la formación neonazi cuenta con mayor implantación. Había aceptado una invitación para pasar diez meses con el grupo, aprender técnicas de propaganda y combate y, posteriormente, regresar a España.
Der III Weg es un partido antisemita, racista y anticapitalista. Su presidente es Klaus Armstroff, electricista que fue cargo del viejo partido neonazi NPD. También cuenta con militantes del FNS, un grupo que fue prohibido en Alemania hace siete años.
El partido con el que se reúne Isabel Peralta se hizo conocido en Alemania cuando organizó marchas de apoyo en favor del criminal de guerra nazi Erich Priebke, descubierto y procesado en 1996 y condenado a cadena perpetua por su participación en la matanza de las Fosas Ardeatinas en 1944, en Italia.
Patrullas para localizar e intimidar a refugiados
Isabel Peralta ya lleva más de un mes con la formación neonazi. Este otoño, por ejemplo, la organización ha realizado grupos de patrullas ciudadanas con el objetivo de localizar e intimidar a refugiados políticos en el estado de Brandenburgo.
La joven neonazi española también ha comprobado las conexiones cada vez más fluidas entre los grupos fascistas y los movimientos contra la vacuna y otras medidas para luchar contra el coronavirus. El partido participó también el 9 de octubre en una marcha de estudiantes contra las restricciones sanitarias en Dresde. También ha participado en fines de semana de formación, entre otros uno titulado: 'Fundamentos del comunismo. La izquierda apesta'.
Dos días antes de su marcha a Alemania, sus compañeros españoles la despidieron con una fiesta celebrada en un local de Madrid. Se ha ido con todos los gastos pagados y sus anfitriones le han escrito varios mensajes en los que la califican como su embajadora en España.