La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha escuchado una carta enviada directamente por una niña procedente de la Cañada Real, un lugar en cuyos sectores VI y V se cumplirá un año sin luz. Así se mantiene desde que el pasado 2 de octubre de 2020 Naturgy y el propio Gobierno regional cortaron la electricidad en este asentamiento.
La carta afirma: "Los días pasan y poco a poco voy normalizando el hecho de estudiar con una vela, ducharme con agua fría o dormir con cinco mantas. Pero lo que no consigo estabilizar son mis sentimientos, ya que me siento excluida del resto de la sociedad", afirma la niña, en una misiva enviada a Isabel Díaz Ayuso y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, el pasado mes de noviembre.
La coportavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Alejandra Jacinto, ha recuperado el escrito para que la presidenta madrileña sea consciente de los efectos de ese corte de luz amparado y promovido por su gobierno en un momento en el que se avecina nuevamente la bajada de la temperatura.
"Le he vuelto a leer un fragmento de una de las cartas que le mandaron varios niños en noviembre de 2020 a usted y al alcalde de Madrid ante la mayor vulneración de derechos humanos cometida por su Gobierno en la región de Madrid contra la población más vulnerable", ha asegurado la diputada, apelando a la empatía de la presidenta madrileña.
"Yo no gestiono sentimientos"
— Ana ?????? (@Zapatista72) September 16, 2021
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"Quiero que recuerde cuando 'la pequeña Isabel' soñaba con traernos 'libertad' a todos los madrileños y que se ponga usted en la piel de esa niña y acabe ya con esta tropelía", ha finalizado su discurso Alejandra Jacinto en la Asamblea regional.
"No gestiono sentimientos"
Ayuso ha respondido afirmando que su verdadero sueño era que no gobernara la izquierda y ha afirmado que ella "no gestiona sentimientos", a la vez que ha calificado la carta como una "cursilería". "Yo no voy predicando desde una supuesta moralidad para tener que hacer de problemas personales la cursilería que hacen siempre ustedes", ha respondido.
Posteriormente, ha respondido que el suministro eléctrico en la Cañada Real no es competencia de la Comunidad de Madrid y ha defendido que en sus manos sí se encuentra la posibilidad de realojar a las familias vulnerables, de las cuales ya hay 130 en esta situación, según ha afirmado.
Ayuso ha defendido que, desde el Gobierno autonómico, se ha desplegado el denominado Pacto Regional por la Cañada Real Galiana, con el que se busca atajar esta cuestión que "tiene más de tres décadas" y que sirve de colaboración entre las administraciones del Estado central, la Comunidad de Madrid y los Ayuntamientos de Madrid, Rivas y Coslada.
Sin embargo, las palabras de Ayuso no sirven para satisfacer las demandas de los vecinos, que llevan un año sin ningún tipo de suministro eléctrico. De hecho, algunas familias ya han empezado a instalar placas solares para solventar el déficit con el que tienen que convivir.
Se trata del proyecto Cañada solar, que comenzó a finales de 2020 para ofrecer herramientas "técnicas, sociales y financieras" para que los vecinos de la Cañada puedan generar su propia energía solar y acabar con la situación en la que tienen que malvivir.
La empresa, asumiendo el riesgo que conlleva ejecutar un plan de estas características sin el permiso de las administraciones, asegura que tenían que ser "valientes" ante una situación donde "se pasan la pelota de unos a otros".
