El pasado lunes 21 de noviembre, los jugadores de la selección de fútbol de Irán se negaron a cantar el himno nacional durante el primer partido del Mundial de Qatar, en el que jugaban contra Inglaterra.
Con este gesto los deportistas hacían un guiño de apoyo a la sociedad iraní, que está viviendo una intensa represión en mitad de las protestas contra el régimen a raíz del asesinato de la joven Mahsa Amini, arrestada por la policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico.
Tras esta reivindicación, una fuente involucrada en la seguridad de la organización del evento deportivo ha confirmado a CNN que el país asiático convocó una reunión entre su Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica y los jugadores de su selección en la que se amenazó a los futbolistas con ejercer "violencia y tortura" contra sus familiares si vuelven a "no comportarse". Nada que ver con las promesas del principio, con las que el gobierno iraní les ofrecía los jugadores "regalos y coches".
Aún no se conoce la fecha en la que se vertieron estas amenazas sobre los miembros de la selección pero ese "conducta inadecuada" por no cantar el himno oficial no se ha vuelto a repetir. En su segundo partido contra Gales el viernes 25, los iraníes ya entonaron el símbolo musical de su país.
El control de la selección iraní
Las fuentes vinculadas a la organización del Mundial también han afirmado que decenas de miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica estaban controlando a los jugadores de la selección de su país: "Hay una gran cantidad de oficiales de seguridad iraníes en Qatar recopilando información y monitoreando a los jugadores", explican.
Estos 'vigilantes' se aseguran de que los miembros de la selección no manifiesten ninguna oposición contra el Gobierno de Irán, así como de que estos no tengan contacto con extranjero o incluso entre ellos fuera de la competición.
No obstante, Carlos Queiroz, entrenador de la selección nacional de Irán, tras una reunión con la organización militar creada para reprimir política e ideológicamente las posiciones contrarias al Gobierno del país, ha asegurado que los deportistas podrán protestar durante el Mundial de Qatar siempre que se respeten las normas impuestas por la FIFA.
