Un abrumador caso de maltrato animal ha estremecido a todos en Buenos Aires (Argentina) y generado gran indignación en redes sociales. Todo parte de la costumbre de tener 'mini-pigs' o cerditos de pequeñas dimensiones, que ha terminado en una tragedia.
La propietaria del animal, Mariela, decidió dar en adopción a Roma, una cerda de tres años, al asegurar que se había hecho "muy difícil" para ella cuidarla. Un hombre se puso en contacto con ellas, según publica el diario argentino La Voz, bajo el pretexto de que quería el animal para "dárselo a sus hijas".
Mariela consideró que Roma, de esta forma, tendría un espacio para vivir, por lo que optó por entregarle el animal. Pero lejos de cuidar de la cerda, el hombre la mató en cuanto llegó a su vivienda. Posteriormente, la asó en la parrilla y la comió con sus amigos. El hombre ya ha sido denunciado ante las autoridades del país.
El portavoz de la Fundación Planeta Vivo, Fernando Pieroni, denunció hace solo unos días en Twitter que el nuevo dueño no había tardado en hacer una parrilla con la cerdito: "Engañó a toda una familia con la promesa de brindarle amor y un hogar, se la llevó a su casa, se la dejó a sus hijas para que jueguen mientras él hablaba con un vecino para que la mate y la cocine", ha denunciado.
Engaño a toda una familia con la promesa de brindarle amor y un hogar, se la llevo a su casa, se la dejo a sus hijas para que jueguen mientras el hablaba con un vecino para que la mate y cocine. Háblame de psicopata
— Fer Pieroni (@FernandoPieron4) January 14, 2023
Facundo Medina asesino#justiciaporRoma pic.twitter.com/C4T6e1OyR5
La antigua dueña tuvo conocimiento de los hechos porque, poco después, preguntó en su grupo de amigos cómo podía cocinarla, por los que se puso en contacto con él para afearle lo sucedido. En uno de los audios, el nuevo dueño le dijo que "la chancha ya estaba en otro plano".
Cerdos mini-pig
Los cerdos mini-pig son una variante porcina, domesticada y de pequeño porte, que se han puesto de moda en Argentina. Cada vez más personas las incorporan a sus hogares al considerar los cerditos son animales inteligentes, pero la moda tiene problemas.
"Me dijo que quería tenerla como mascota, que tenía dos nenas, me mandó vídeos jugando con las hijas. No lo puedo creer. Es muy cruel, me siento muy mal", denuncia y lamenta Mariela en declaraciones al diario Clarín. Los mini-pigs son animales con peso de hasta 100 kilos, a diferencia de los cerdos normales, que suelen pesar hasta 400 kilos.
Por estos hechos, el hombre ha sido denunciado dentro de la Ley 14.346 por "maltrato animal y averiguación de ilícito". Además, se incluirá otra demanda civil por daños y perjuicios en contra de la familia que le cedió el cerdo mascota. La legislación argentina establece penas de cárcel de quince días a un año por maltrato animal.