Reconozcámoslo. Los anuncios de higiene femenina no son muy verídicos. No hay que ser una mujer para saber que en la vida real las chicas que se depilan tienen pelos en las piernas en vez de aparecer suaves y radiantes antes de usar la cera y, cuando se tiene la menstruación, no aparecen nubes de colores alrededor sino que la gran mayoría sufren fuertes dolores.
Una compañía estadounidense ha pensado en esas mujeres que se retuercen de dolor cuando menstrúan y ha tenido, posiblemente, la mejor idea del siglo: una especie de tampón de marihuana denominado Foria Relief para calmar cualquier sufrimiento que pueda causar la regla. ¿Cómo funciona? Se trata de un supositorio que se coloca como cualquier otro pero siendo introducido por la vagina (tampoco vamos a explicar cómo se usa uno a estas alturas de la vida). La clave está en su composición formada por únicamente tres ingredientes: mantequilla de coco orgánico, aceite de cannabis formado por CO2 presurizado y diez miligramos de un aislante de cannabidiol.
Al parecer, cientos de mujeres están encantadas con esta solución según varias páginas webs. Tal y como reconoció una usuaria de estos tampones llamada Stefanie Iris Weiss a SheKnows, usar Foria Relief calmó por completo todos sus dolores menstruales: "En cuestión de media hora mis calambres se esfumaron. No solo se fueron sino que todo mi cuerpo empezó a sentirse lubricado en el buen sentido de la palabra", explicó Stefanie, y continuó detallando: "Como si fuera mantequilla derretida esperando a ser mezclada con chocolate para hacer galletas. Pero aún así no estaba colocada para nada". Si Stefanie dice que no lo estaba, nos fiamos de ella.
Pero... ¿puedes colocarte con un tampón de marihuana?
Si está compuesto por elementos del cannabis, ¿por qué las mujeres que usan estos tampones no se colocan? Simplemente por dónde se sitúa esta especie de tampón. No es lo mismo consumir cannabis por vía respiratoria que colocarlo en tus partes íntimas, por lo que de esta manera los efectos del supositorio de cannabis quedan localizados y te hacen sentir como describe Stefanie. Eso sí, esta maravilla del siglo XXI no detiene la hemorragia mensual.
El milagroso producto es comercializado por la compañía Foria, que se animó a crearlo tras el éxito que tuvo su anterior producto, Foria Pleasure, un lubricante con marihuana. Los supositorios vaginales de cannabis cuestan alrededor de 39 euros y solamente están a la venta en los estados norteamericanos de California y Colorado, por lo que por ahora es muy difícil que aterrice en España. Además, el producto no ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, así que no está regulado como medicamento.