Tomás Pueyo, ingeniero que trabaja en Silicon Valley, supo predecir en su momento que la pandemia iba a convertirse en una catástrofe mundial. Cuando en febrero y marzo de 2020 Madrid notificaba únicamente 600 casos, avisó de que la realidad era que el número de casos estaría entre 10.000 y 60.000, como se ha ido confirmando después.
Ahora, el experto ha publicado un nuevo texto en su blog donde avisa de que la sexta ola de la pandemia provocada por la variante ómicron será previsiblemente la última, por lo que pronto deberíamos vislumbrar el final de la pandemia: "En un mes, más o menos", afirma.
En el escrito, Pueyo afirma que la variante ómicron se transmite de una forma muy rápida, lo que puede ser bueno ya que, entre la inmunidad existente gracias a las vacunas y la velocidad de la propagación de ómicron, las olas serán en el futuro mucho menores y además mucho más débiles de lo que son ahora.
De pandemia a endemia
El experto ha dado también una entrevista a NIUS donde ha explicado con más detalle sus pronósticos. En ella, Pueyo afirma que "si al principio de la pandemia moría un 1% de los contagiados, aproximadamente, ahora con un ómicron un 70% menos mortal, con unas vacunas que pueden reducir la mortalidad hasta el 90% y, además, con un tratamiento capaz de reducir la enfermedad grave en un 90%, te encuentras que en vez de morirse uno de cada 100, fallece uno de cada 100.000".
Por lo tanto, explica que en unos meses pasaremos de pandemia a endemia: "En la pandemia tienes que tener mucho cuidado para parar la enfermedad, pero cuando esta es endémica, no. Hay que continuar con el día a día y vivir con ella. Acaba la fase de la pandemia y empieza el momento endémico en el que no deberíamos adoptar medidas especiales que no estemos dispuestos a tener durante el resto de nuestra vida", aclara.
"Ya no es una pandemia, sino un virus como cualquier otro", dice Pueyo. La única situación con la que los pronósticos podrían no cumplirse es que aparezca otra variante que sea más virulenta y más contagiosa que ómicron. "Ahí es donde deberíamos anticiparnos y ver qué puede pasar", añade.
Aun así, el experto lo ve poco probable: "Tenemos 200 virus de resfriados y de un día para otro no se vuelven más virulentos, no suele ocurrir. Lo normal es que surjan variantes más infecciosas a costa de la virulencia. Aunque sea poco probable, si apareciera una variante más virulenta después de ómicron ya tendríamos inmunidad de rebaño y tratamientos, con lo que aún así podríamos decir que la pandemia se acaba", afirma Pueyo.
