José Manuel Franco, delegado del Gobierno en Madrid, ha sido llamado a declarar como imputado el próximo 5 de junio en el marco de la Operación Sanitario, acusado de un presunto delito de prevaricción por autorizar las manifestaciones del 8M por el Día Internacional de la Mujer a pesar del riesgo de contagio por coronavirus.
Así lo ha ordenado la titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez-Medel basándose en un informe elaborado por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid. La denuncia contra Franco fue presentada por un particular y también iba dirigida al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a los otros 16 delegados del Gobierno, aunque no han podido ser imputados ya que la jueza encargada no tiene sompetencias en otras comunidades.
El atestado de 81 páginas de la Guardia Civil, según ha publicado El Diario, está plagado de errores, noticias tergiversadas, declaraciones manipuladas y errores. Hay que recordar que el jefe de esta unidad, el coronelDiego Pérez de los Cabos, ha sido cesado este lunes 25 de mayo por parte del ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, por "pérdida de confianza".
Declaración de pandemia por parte de la OMS
El informe de la Guardia Civil analiza los avisos de los organismos internacionales supuestamente ignorados por parte del Ejecutivo. En la página 8 del atestado se especifica que "el 30 de enero de 2020, la OMS califica el actual brote de Covid-19 como pandemia". Se trata de un información falsa, ya que el director general de la Organización Mundial de la Salud, Adhanom Ghebreyesus, declaró como pandemia mundial al coronavirus el 11 de marzo de 2020, tres días después de las manifestaciones del 8M.
Los guantes de las ministras
Al informe también le acompaña un anexo en DVD que contiene un vídeo publicado por Cope que desgranan en la página 13. Advierten que algunos miembros del Gobierno como Isabel Celaá, ministra de Educación, o la diputada socialista y ex ministra de Trabajo Magdalena Valerio, llevaron guantes de látex durante la manifestación porque el Gobierno sabía del peligro real del coronavirus.
De nuevo, se trata de una información tergiversada. Ninguna llevó guantes de látex como medida preventiva, sino únicamente por el color morado de los mismos, color del movimiento feminista. Es más, Celaá solo los llevó al comienzo de la marcha y luego se los quitó mientras que Valerio solo se lo puso en una mano como gesto simbólico. Además, en las manifestaciones de años anteriores se cientos de mujeres llevaron guantes de látex morados.
Fernando Simón y la transmisión comunitaria
En la página 73 el informe de la Guardia Civil cita una noticia de Redacción Médica para asegurar que Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, aseguró el 28 de febrero que no se podía "contener el virus".
"El 28 de febrero de 2020 admitió que había transmisión comunitaria. Este escenario define que no se puede contener el virus controlando a las personas que estén infectadas y a su entorno, porque ya no se conocen éstos", apunta el informe.
Sin embargo, en la noticia publicada por dicho medio, en ninguna parte se expone que Simón señalara una una transmisión comunitaria del Covid-19. "Simón ha confirmado que 'todos los casos son importados' y que, por el momento, si de estos casos no se notifica ninguna trasmisión secundaria, 'no hay razón para cambiar de escenario'.", reza la información original.
Simón también indicó, según recoge Redacción Médica, que cualquier posible transmisión comunitaria se había producido a "nivel muy bajo": "Esto, según ha explicado, se debería a que en los casos que se consideran por ahora 'trasmisión comunitaria' (Madrid y Sevilla) se han podido trasmitir a un nivel 'muy bajo'".
"El Gobierno conocía la gravedad desde enero"
Una de las fuentes de referencia del atestado de la Guardia Civil es OKDiario. Cita a este medio en su página 74 para afirmar que "el Gobierno ya conocía desde el mes de enero la gravedad de la epidemia del coronavirus". Para ello se basa en una noticia de este medio que que titula que "Pedro Duque admite que el Gobierno ya conocía en enero la gravedad del coronavirus", amparada en uan declaración del ministro de Ciencia e Innovación en el mes de marzo.
"Reconoció en la tercera semana del mes de marzo de 2020, la gravedad del coronavirus desde el mes de enero de 2020. En rueda de prensa junto al Ministro de Sanidad, explicó que 'los investigadores españoles empezaron a trabajar de forma intensa desde que se conoció esta enfermedad, en el mes de enero. Ya el 2 de febrero tuvimos una reunión con los profesores Juanes y García Sastre, este último en Nueva York, para asegurar que tengan más facilidades y todos los medios necesarios para investigar la enfermedad. Ese mismo 2 de febrero liberamos medios e hicimos cambios legales para reducir plazos que culminaron en el Real Decreto de Estado de Alarma donde hemos puesto todas las medidas en funcionamiento", apunta el documento.
En el mes de enero era conocida la gravedad de la epidemia (que no pandemia en aquellas fechas) por su incidencia en China, pero no había evidencia alguna de que hubiese contagios en España. Sin embargo, la Guardia Civil vincula en su informe estas declaraciones del ministro Duque a los conocimientos que debía tener José Manuel Franco, delegado del Gobierno en Madrid, en torno al coronavirus y sus efectos: "Es parecer de esta instrucción que la Delegación del Gobierno tenía datos objetivos suficientes derivados de las circunstancias concretas de cada caso para haber ponderado bienes y derechos protegidos en nuestra Constitución contando con tales datos desde la primera semana del mes de marzo de 2020".
Congreso evangelista
La Guardia Civil, en la página 77 del atestado, también señala hacia un supuesto trato desigual del Gobierno por prohibir la celebración de un congreso evangelista el día 6 de marzo pero a su vez permitió la celebración del 8M.
"Como se ha reflejado, el director del CCAESS (Fernando Simón) realiza las manifestaciones expuestas el día 7 de marzo de 2020 en el sentido de que se puede ir sin peligro al acto central del 8M y sin embargo prohíbe el desarrollo de un congreso evangelista el 6 de marzo, cuyo conocimiento ha tenido esta unidad por los medios de comunicación social", relata el informe haciendo de nuevo referencia a una noticia publicada por OKDiario.
La Guardia Civil señala que esa prohibición se amparó en un documento "suscrito el 6/03/2020 por la Directora de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, quien haciendo referencia al oficio del Ministro de Sanidad 03/03/2020 'Recomendaciones de medidas extraordinarias en relación con la situación provocada por el nuevo coronavirus Covid-19', significa los riesgos de transmisión y para la salud de la población de eventos multitudinarios de cualquier tipo, recomendando su aplazamiento".
Sin embargo, si nos dirigimos a la noticia de OKDiario, es evidente la omisión de datos por parte de la Guardia Civil. Lo que verdaderamente expone el oficio es: "Los eventos multitudinarios de cualquier tipo, con amplia presencia de personas procedentes de cualquiera de las zonas del mundo en que se ha constatado transmisión del virus SARS-CoV-2, se consideran evento de riesgo para la transmisión de este patógeno y suponen un riesgo para la salud de la población. Se recomienda el aplazamiento de estos eventos".
Precisamente esa es la diferencia fundamntal con el 8M. El congreso evangelista era un encuentro mundial al que iban a asistir personas de diferentes países, algo expresamente puntualizado en ese oficio del Ministerio de Sanidad, una situación diferente a la manifestación del 8M.
