Hoy en día todo el mundo cuenta su vida en las redes sociales. Cada vez son más los usuarios que ganan grandes cantidades de seguidores (y de dinero) por mostrar sus formas de vida, casi todas ellas con todo tipo de lujos y caprichos, difícilmente alcanzables para el resto de mortales. Son jóvenes que trabajan para marcas, y hacen publicidad introduciendo productos y servicios en su día a día; para, finalmente, compartirlo en sus perfiles de redes sociales.
Gracias a la popularidad de estos influencers, en la actualidad resulta complicado distinguir entre la realidad y lo que es mera publicidad. Alrededor de estas personalidades tan conocidas en las redes sociales, se crean todo tipo de polémicas sobre lo que ellos mismos deciden mostrar a sus seguidores. Polémicas a las que se ha sumado un usuario de Instagram británico, que ha querido denunciar esta línea cada vez más fina que separa la realidad de la ficción.
Del sofá de casa a un jet privado
Byron Denton es un estudiante londinense de 19 años. Gracias a sus conocimientos en programas de edición como Photoshop, así como su dominio de redes sociales, este joven ha conseguido revolucionar plataformas como Instagram al publicar imágenes en las que demostraba un supuesto (envidiado por muchos) alto poder adquisitivo.
En las fotografías publicadas, este estudiante aparecía con bolsas de Louis Vuitton delante de un escaparate, como si acabara de salir de comprar en una de las tiendas de esta marca de lujo. En otra de las polémicas imágenes, el británico aparecía sentado y relajado en lo que parecía ser jet privado.
Pero nada de lo que mostraban esas imágenes era real. La instantánea con las bolsas era solo un recorte de una fotografía del hijo de Will Smith, Jaden Smith. Y en la publicación del jet privado, la localización en la que se encuentra Denton era en realidad un sofá borrado con Photoshop y sustituido por el cómodo asiento de un avión privado, al que se añadieron su alrededor todo lujo de detalles.
Con esta última publicación, el joven, conocido en YouTube como 'tbhbyron' consiguió 1000 likes en apenas 7 segundos. Y según informa Daily Mail, también ganó en solo una semana más de 1000 seguidores en su perfil.
Un experimiento social
Una semana fue lo que duró el experimento social con el que Byron quiso demostrar lo fácil que puede resultar fingir ser un influencer con miles de seguidores, solo por aparentar un alto nivel de vida, y poder permitirte comprar objetos caros de marca, y otros lujos al alcance de muy pocos.
Este estudiante ahora cuenta con más de 70.000 seguidores en Instagram y 80.000 suscriptores de YouTube. Fue en esta plataforma donde desveló su farsa a través de un vídeo explicativo. "Después de ver que Instagram no paraba de recomendarme vídeos con personas que fingían una vida ideal, pensé que sería divertido ponerle mi propio toque y fingir ser rico durante una semana", indicó. Tras la publicación del video muchos de sus seguidores confesaron que se sintieron engañados por Byron. Pero otros muchos también le elogiaron por sus habilidades en Photoshop.