El polémico influencer Xavier Caballol Lasso, conocido popularmente como Ferrariman, ha sido ingresado en estado grave en el hospital Josep Trueta de Girona después de sufrir un accidente de avioneta este sábado, 19 de octubre, en las inmediaciones del aeródromo de Viladamat. Su pareja también se encuentra hospitalizada por este suceso.
Los Boberos de la Generalitat recibieron el aviso a las 18:57 horas del sábado y activaron siete dotaciones y el Grupo de Emergencias Médicas (GEM) para atender a Ferrariman y su pareja. Además, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) trasladó a los afectados al Hospital Josep Trueta de Girona. Los Bomberos tuvieron que intervenir para extraer a los dos ocupantes de la aeronave y se movilizó. dos unidades terrestres y un helicóptero.
"Hemos vuelto a nacer"
Posteriormente, el youtuber ha publicado un vídeo corto en su perfil de Instagram, donde ha agradecido desde el hospital la intervención de los efectivos de urgencias: "Habéis sido muy humanos, eficientes, competentes y tiernos", ha explicado, mostrando graves heridas en el rostro, cráneo y pierna.
El piloto se ha mostrado consciente de que este accidente le ha llevado, tanto a él como a su pareja, a "volver a nacer" y ella ha "agradecido" seguir viva "tras un accidente muy feo".
"Viajes a todo lujo" y conducción temeraria
Xavier Cabadoll es conocido por sus vídeos en Youtube, donde aparece con su coche Ferrari y casi siempre acompañado de su novia Alba. El influencer, andorrano, es conocido en internet por su pseudónimo Ferrariman, con el que firma sus publicaciones.
Además, es dueño del Grupo Busco, una empresa propietaria de varios portales de internet, como buscocasa.ad, buscocotxe.ad y buscofeina.ad. Además de sus actividades empresariales, está promocionando actualmente un curso o comunidad con la que promete "triunfar en la vida" y conseguir un Ferrari, que promete como meta "para dejar de ser un fracasado".
Ferrariman fue detenido en verano de 2023 en Andorra por conducción temeraria. Este hecho y sus constantes críticas al país, le han llevado a experimentar una mala imagen en este micro estado, que se extiende a toda la opinión popular.
Además, en España también ha tenido problemas. En verano de 2024, denunció públicamente que el inmobiliario catalán Gibert Castells se había quedado presuntamente una cantidad económica en concepto de arras de una propiedad que él y su pareja dieron en concepto de un piso.