El mal uso que algunas personas hacen de las redes sociales sobrepasa lo imaginable. Hay quien no tiene límites a la hora de conseguir likes o seguidores, cayendo en comportamientos temerarios, cometiendo ilegalidades e incluso jugándose la vida para conseguir el selfie perfecto. Todo vale para hacerse viral y alcanzar al máximo número de personas posibles.
El último caso de 'influencer' sin principios llega desde Polonia, donde Julia Stonska ha destrozado una estatua de más de 200 años de antigüedad a base de martillazos. La joven de 21 años se desplazó hasta el Swiss Valley Park de Varsovia con un martillo y rompió la nariz de una de las estatuas. Grabó el momento y lo compartió en sus stories de Instagram para sus 5.900 seguidores.
Su intención de ganar notoriedad, sin embargo, se le volvió en contra, ya que las redes condenaron el acto vandálico perpetrado por Stonska. La crítica ha sido unánime, obligando a la inconsciente a pedir perdón.
Pide perdón por sus actos
La polémica suscitada ante el vídeo del acto vandálico llevado a cabo por Julia Stonska le ha acarreado multitud de críticas, lo que la ha llevado a pedir disculpas por el suceso: "Lo que ocurrió ayer no tenía que haber pasado y lamento lo que hice, en serio. Soy tan estúpida. No voy a comentar por qué lo hice, porque se trata de un asunto privado, pero quiero pedir perdón a todo el mundo".
A la espera de las consecuencias penales que pueda acarrearle el destrozar una obra de arte de dos siglos de antigüedad, por el momento Stonska ya ha comenzado a sufrir algunas consecuencias. El banco online mBank, que iba a realizar una campaña de publicidad con la influencer, ha cancelado la colaboración. "No aprobamos este comportamiento", han anunciado.
Julia Stonska, desde que publicó el polémico vídeo, no ha vuelto a compartir contenido. Eso sí, sus seguidores han ascendido levemente hasta los 6.500, por lo que quizás se lo piense dos veces antes de hacer otra estupidez para que le hagan un poco de casito.