Si Benidorm Fest el año pasado fue un éxito de público y crítica fue en parte por la cercanía del formato. Ofrecer un concurso musical adaptado a la época, que hablara de tú a tú al espectador fue uno de los puntos fuertes de un festival que solo así pudo llegar a ser 'El festival que quieres'.
Uno de los factores de ese éxito fue la apuesta por Inés Hernand entre los presentadores del evento. Contando con el toque levantino y sosegado de Máximo Huerta y la iconicidad inacabable de Alaska, Inés supo mejor que nadie traer a las galas ese lenguaje y esa actitud de una generación Z que conoce de sobra por sus trabajos en Playz.
Este año, los presentadores de Benidorm Fest han cambiado bastante, pero Hernand se mantiene como nexo entre ediciones, dispuesta no solo a ser la veterana, sino a mantener esa espontaneidad que tan bien hace al formato.
Ataviada con una camiseta creada por su diseñador de cabecera y encargado de su parte estética, nos atiende en plena presentación de la edición de 2023 de Benidorm Fest. Asumiendo "nervios y una ansiedad crónica que le acompaña", Hernand no oculta que el festival "es una experiencia profesionalmente muy bonita", que buscará exprimir y también "disfrutar a tope".
"Tengo la suerte de repetir y saber dónde estoy"
La comunicadora nos comenta que la conexión con los presentadores y el ambiente es total. Mientras que Mónica Naranjo y Rodrigo Vázquez, sus 'compañeros de batalla', asumen que Hernand es la que sabe del tema, ella deja claro que "la suerte de repetir y conocer el entorno" será fundamental.
Confesando que el año pasado acudió "a llevarse bien con todo el mundo, del regidor al último camarero", también reconoce que "este año habrá más lío", ya que "todo lo que ocurre estará en la mirada pública", generando presión.
Sin embargo, sobre todo, pide empatía para los chicos participantes. Pidiendo "entender lo que se está haciendo", y reconociendo "que hay mucha gente detrás", el respeto parece la única vía para que Benidorm Fest funcione como el año pasado.
De esta forma, Inés Hernand afronta 'un ascenso' de los que se estilan mucho en nuestra era. Un ascenso de hacer lo mismo que el año pasado, pero tener el reto de mantener ese tono canalla que fue el arma secreta de Benidorm Fest. Por su actitud, no será, demostrando una vez más ser una de las grandes caras de la pública.
