Inditex recupera el pulso tras la pandemia. El año 2021 supone la recuperación para la enseña española, después de vivir un ejercicio, el de 2020, en el que el beneficio se redujo hasta en un 70% por la paralización de la economía en que derivó la pandemia del coronavirus.
La firma textil ha sido hábil y ha sabido dar un giro de 180º a su situación con el progresivo relajamiento de las restricciones. Entre el 1 de mayo y el 6 de junio ha conseguido aumentar sus ventas del período previo a la crisis sanitaria: un 5% más que lo ingresado en el mismo período de 2019 y un gran 102% más que en el tramo de 2020. A pesar de todo, seguirá cerrando tiendas: 400 a lo largo de 2021, una lista completa que puede consultar aquí.
La mejora apuntada es a tipo de cambio constante y no la cifra real, que no se facilita todavía en este período. Es decir, se trata de un valor en bruto que no tiene en cuenta el valor de las divisas en las que se han obtenido los ingresos en los diversos mercados en los que la enseña gallega opera a nivel internacional.
La firma obtiene una mejora en sus ingresos que se siente desde el primer trimestre de 2021, en el tramo de febrero a abril, con beneficios de 421 millones de euros declarados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). También se nota una mejora en el tráfico de tienda, cuya red se está reduciendo para aglutinarse en locales más grandes y vistosos.
Giro tecnológico y cierre de tiendas
A juicio de Inditex, la clave para haber experimentado tan rápido un aumento de ventas respecto a la época prepandémica se encuentra en el proceso de digitalización de la enseña: "La diferenciación y transformación estratégica hacia un modelo de negocio totalmente integrado, digital y sostenible continúa dando resultados", ha afirmado Pablo Isla, presidente de Inditex, en la nota de resultados.
Precisamente, Inditex está enfocando su estrategia, al igual que otras firmas del sector, en reforzar la venta online para dejar sus tiendas como una especie de 'showroom' con un papel secundario. En este proceso, hay al menos 71 tiendas que han desaparecido, principalmente en capitales de provincia y también en calles destacadas de las grandes ciudades españolas, como consecuencia de este plan de reestructuración.
Inditex afirma que su intención pasa por reorganizar su red, eliminando las tiendas más pequeñas para crear grandes establecimientos que puedan absorber la clientela de los grandes, eliminando gastos superfluos en alquiler (o ganando ingresos en ladrillo).
La firma sigue apostando por la venta física, aunque de otra manera. En esta nueva concepción entra su macro tienda de la Plaza de España, donde ubicará Zara y Zara Home con más de 7.700 metros cuadfrados; así como un Stradivarius de 1.200 metros cuadrados.
