La ANC andaluza, que proclamó unilateralmente la independencia de la comunidad el pasado 4 de diciembre, ha vuelto a la palestra con motivo de la conmemoración del día de la toma de Granada por parte de los Reyes Católicos.
En un manifiesto difundido por redes sociales, la asociación separatista asegura que la comunidad se ha convertido en una colonia española desde 1492, en concreto fue "el día en el que Andalucía se convirtió en la colonia pobre de la corona de España".
La asociación, liderada por el escritor Pedro Ignacio Altamirano, lamenta además que el pasado 2 de enero se vuelva a "celebrar" la toma de Granada, y asegura que la capitulación de los seguidores de Boabdil supuso "la vil expulsión del pueblo andaluz".
La plataforma impulsora de la República Federal Andaluza sostiene que "desde entonces, la Andalucía conquistada, no ha vuelto a levantar cabeza. Ocupada en lo militar y en lo económico, los pocos andaluces que quedaron fueron convertidos en verdaderos esclavos de amos llegados de otras tierras de la península".
Según un comunicado emitido a los medios, la asociación recalca que desde entonces "Andalucía es un territorio ocupado por los vencedores, que aún nos tienen oprimidos y sin identidad, para lucimiento de los grupos fascistas y franquistas aireando añejas banderas llenas de sangre".
Llega a comparar Andalucía con Irak o Afganistán
El comunicado de la asociación independentista continúa con unas afirmaciones que no dejan a nadie indiferente. Según Altamirano, Andalucía forma parte de una colonización que supuso "masacrar a nuestros ciudadanos".
Para explicar esta afirmación, el presidente de la asociación compara todo lo sucedido en Andalucía con Irak o Afganistán, y asegura que Andalucía ha sido un ejemplo de "expolio de recursos", con el fin de que los ciudadanos "se conviertan en seguidores del imperio".
Por todo ello, considera que Andalucía sigue siendo una colonia y que "la toma de Granada se encarga de recordarlo todos los años. Nos recuerdan que somos súbditos del Estado español. Que nos masacraron y que nos ocuparon. Que nos robaron nuestras tierras, las casas, las infraestructuras y fueron repartidas entre los vencedores. Nos dijeron que ya no eramos andaluces, que eramos españoles".
Para finalizar, la plataforma independentista reclama una "nación libre y soberana" y el fin de la fiesta para celebrar la toma de Granada: "Nunca más la celebración de la ocupación del genocidio del pueblo andaluz".
La toma de Granada, que se materializó el 2 de enero de 1492 con la entrega de la ciudad por parte del rey Boabdil, supuso el fin de la colonización musulmana de la Península Ibérica durante un período de ocho siglos.
