El Juzgado de lo Penal número 1 de Ciudad Real ha condenado al Servicio de Salud de Castilla y la Mancha (Sescom) a pagar 5,5 millones de euros en concepto de "lesiones por imprudencia" a la familia de una niña por una grave negligencia y errores médicos durane el parte, según informa el diario local Lanza.
El alumbramiento se llevó a cabo el 14 de octubre de 2012 en el Hospital Gutiérrez Ortega de Valdepeñas.Tanto el ginecólogo como la matrona fueron conscientes de que durante elparto se dieron diferentes problemas en el feto, pero no hicieron nada para prevenir los daños irreversibles que se estaban produciendo.
Según la sentencia, la bolsa se rompió de manera espontánea y esto generó que los desechos que había producido el bebé durante el embarazo se esparciesen por el líquido amniótico. El fallo describe que se detectaron 26 episodios de disminución de la frecuencia cardíaca. La sentencia, además, advierte del deficiente control del parto, lo que provocó en la bebé un grave y severo daño neurológico por falta de oxígeno.
La niña, que ahora tiene 7 años, sufre un daño neurológico, tetraplejia, epilepsia no controlada, desorientación y una dependencia de cualquier persona para sus cuidados básicos. No puede levantarse de la cama ni realizar ninguna actividad sin ayuda. La pequeña sufre secuelas motoras y sentivas de origen central.
El letrado que ha llevado el caso, Francisco Javier Fernández-Bravo, ha dictaminado la mayor indemnización por mala praxis médica impuesta en España, según la Asociación del Defensor del Paciente.Se trata de una sentencia pionera que condena a la Junta y sus aseguradoras a pagar 5.5 millones de euros a la familia.
Los padres serán dotados de 25.000 euros anuales donde se incluyen los gastos por asistencia sanitaria por tetraplejia (12.000 euros), epilepsia (4.000 euros) y la rehabilitación de tratrapejia (9.500).Aparte se le ingresarán 3,3 millones en concepto de intereses, ya que hace 7 años del parto, y lotros 2,5 millones de indemnización.
"La sanidad no goza de buena salud"
Según el informe de la Asociación de El Defensor del Paciente, en 2019 se han registrado 757 muertes por negligencia. Y aunque el número de negligencias ha descendido respecto al 2018, "la sanidad no goza de buena salud".
En la memoria anual de esta asociación se muestra cómo la mayoría de las muertes se deben a un error del diagnóstico. Los casos más habituales de negligencias se producen como consecuencia de una mala praxis como retrasos de ambulancias, altas antes de tiempo, infecciones hospitalarias e intervenciones mal realizadas.
En el informe se hace un llamamiento a potenciar la formación de los estudiantes de Medicina en relación con el paciente y achaca estas negligencias a que hay falta de especialistas o los recortes de sanidad.
En cuanto a los casos de discapacidad: de las 106 casos de negligencia, fueron 21 casos más que en 2018. Estos pacientes quedaron en estado de tetraplejia o paraplejia después de una intervención quirurjica.
Madrid es la comunidad autónoma que más denuncias tiene por negligencias médicas. En total, 3.204 casos, seguida de Andalucía con 2.593 y la Comunidad Valenciana con 1.152. Las comunidad que menos casos registra es La Rioja con solo 66.