La crisis sanitaria del coronavirus ha obligado el confinamiento para evitar contagios. Muchas personas han tenido que pasar largas semanas en casa sin ninguna compañia, por lo que buscar entretenimientos se ha convertido en algo fundamental. Y en esto también entran nuestros hábitos sexuales, pues han tenido que cambiar drásticamente debido a la pandemia.
El consumo de porno ha aumentado exponencialmente mientras que todos, como una montaña rusa, hemos pasado por días de absoluta apatía a otros de verdadero ardor sexual. Sí, probablemente hemos perdido la cuenta de las veces que nos hemos masturbado.
En mitad de este panorama, hay quien ha sentido la necesidad de buscar una solución para hacer más llevadero el encierro. Durante las semanas de confinamiento, se ha experimentado un aumento más que significativa de la venta de muñecas sexuales. Así lo ha revelado Janet Stevenson, cofundadora de Sex Doll Genie, empresa dedicada a la fabricacion de este tipo de muñecas.
"Tenemos muchos productos en stock, pero no podemos trabajar lo suficientemente rápido como para satisfacer la demanda. Estamos contratando lo más rápido posible y hemos creado varios cargos nuevos en la gestión de cumplimiento y la atención al cliente tanto en Estados Unidos como en Europa", ha explicado la empresaria confirmando que han tenido que aumentar su plantilla.
También parejas
Como era de esperar, el perfil mayoritarios de los que han comprado muñecas sexuales son hombres solteros que han visto en este juguete la mejor manera de hacer más llevadera la soledad y la falta de sexo. "La compañía observó un aumento del 51,6% en los pedidos de hombres solteros en febrero y marzo", detallan.
No obstante, también han observado un cambio importante en el perfil de los que han demandado muñecas sexuales y es que también se han animado muchas parejas, registrando un "crecimiento interanual del 33,2% en los pedidos realizados por parejas en abril", han detallado.
Para Stevenson, lo interesante de este incremento en la demanda es que también revela "un cambio demográfico que es muy positivo para la industria de las muñecas sexuales", lo cual demuestra un cambio de actitudes de la sociedad.
"El estereotipo tradicional de que los solitarios eligen muñecas sexuales como último recurso es totalmente inexacto. Lo que estamos viendo ahora es que el uso de muñecas se está haciendo más popular, con hombres y mujeres entusiasmados por llevar una muñeca a su habitación", ha manifestado Stevenson.