Marcus Yam, fotógrafo de Los Angeles Time, ha conseguido inmortalizar en una fotografía el miedo que invade tanto a los ciudadanos como a los animales que se encuentran resistiendo a los bombardeos provocados por la invasión rusa en Ucrania.
La imagen en concreto ha sido tomada en la ciudad de Irpin, una de las más afectadas y destruidas por los rusos. En ella fue ejecutado hace unos días el periodista estadounidenses Brent Renaud y en esta ciudad también ha sido donde su alcalde, Oleksandr Mrkuscyn, ha prohibido el acceso a los medios de comunicación para evitar que sean víctimas de los rusos.
En la fotografía puede verse como un perro está parado en medio de la calle mientras que al fondo se observan vehículos totalmente destruidos y quemados. Es el miedo a los bombardeos lo que lo tiene totalmente paralizado, sin poder continuar.
Así, su dueño, Andrei Kulik, comprende la situación y entiende que es inútil que tire de la correa para intentar forzarle a moverse, por lo que se detiene, se agacha y pone su cabeza entre sus manos para calmarle, lo que ha dado lugar a esta increíble fotografía.
#Ukraine Irpin. Andriy Kulik is trying to comfort his dog, paralyzed by fear. The dog refuses to walk after shelling. pic.twitter.com/XshW5C8YyF
— Hanna Liubakova (@HannaLiubakova) March 15, 2022
Más imágenes
En otra instantánea se ve al hombre entrando por una puerta con su animal, ya en su casa. Esta fotografía fue tomada el pasado 13 de marzo, el día 18 de la guerra. Su autor ha estado capturando todo tipo de imágenes desde que comenzase la invasión.
Day 18 of Russian invasion: Saying goodbye to Irpin. Dimness sustains. Ferrying souls to a broken bridge. A gentle kiss to reassure. Dog paralyzed with fear. Bombardment reaches beyond. Dark smoke paints sky. A journalist killed. Daylight tears. #Ukraine https://t.co/dbd1rT9MSn pic.twitter.com/yFSZjBqOoi
— Marcus Yam ?? (@yamphoto) March 14, 2022
Muchas de estas fotografías son terriblemente desagarradoras y para conseguirlas el fotógrafo ha estado pasando largas horas entre ataques impredecibles."Dirigirse a zonas de guerra va en contra de todos nuestros instintos" dijo Yam a NPR, pero "nosotros, como fotógrafos, como fotoperiodistas, hacemos todo lo posible para capturar la emoción humana", continua.