No hay mal que por bien no venga. Y es que hasta una pandemia mundial puede suponer un filón para hacer negocio. Ya que las mascarillas se han convertido en un elemento indispensable (y obligatorio) para frenar los contagios, ¿por qué no aprovecharlo? Así, han surgido multitud de empresas que han sacado su propia línea de mascarillas, con diseños de todo tipo y para todos los gustos.
La última tendencia en este mercado es, cuanto menos, curiosa. Un diseñador de prótesis y especialista en maquillaje ha lanzado unas mascarillas de silicona que parecen un par de testículos con su bolsa escrotal y todo. El nombre de este producto, cómo no, es igual de original: 'BallBag'. Desde luego, si vas por la calle con esta prenda, no pasarás desapercibido.
Lo cierto es que estas mascarillas son increíblemente realistas. Hechas de silicona, contienen todo tipo de detalles como arrugas o folículos pilosos. Además, hay disponibles diferentes variantes según el tono de piel.
Billy, el británico creador de estas mascarillas, se ha visto abrumado por la ingente cantidad de pedidos que le han llegado desde que pusiera a la venta sus 'BullBags'. Tanto es así, que ya se ha agotado el primer lote, por lo que sigue trabajando para que estén disponibles lo antes posibles. Se pueden compara en la página web Billysballbags.com por unos 35 euros.
Negocio escrotal
A Billy se le ocurrió la idea gracias a la despedida de soltero de un amigo. "No quería disfrazarlo con el tradicional 'traje de consolador', así que decidí intentar hacerle un par de huevos colgantes para que se le salieran por la entrepierna. He tenido experiencia con el maquillaje y la creación de prótesis en el pasado y después de algunos intentos logré hacer un par de testículos muy convincentes", explica. A raíz de ahí, ha creado todo un negocio en torno a los testículos.
Además de las mascarillas, Billy tiene una amplísima gama de productos como llaveros, carteras pendientes, adornos navideños, imanes. Todo ello, cómo no, de temática escrotal.
