A todos nos gusta Pablo Picasso, pero a algunos más que a otros. Probablemente no exista un fan más acérrimo del artista malagueño que Eli, un joven de 27 años de Brighton, Inglaterra. Para comprobarlo, no hay más que verle. Nuestro protagonista lleva una década en un proceso de transformación para convertirse en un personaje de la época abstracta de Picasso, como si de una señorita de Avignon más se tratara. Para lograrlo, se ha tatuado de negro todo el cuerpo.
"Picasso es una gran inspiración para mí, en especial su arte abstracto. Quería parecerme a uno de los personajes de las obras abstractas de Picasso. Me encanta el arte abstracto, es pura expresión", asegura Eli al Daily Mail.
El joven relata que fue un tatuaje tribal de su tío en su visita a España lo que le inspiró y motivó a llevar a cabo esta transformación. El cambio ha sido paulatino, como demuestran las fotos que Eli ha ido compartiendo.
Lo que más puede impresionar es la tinta negra inyectada en los ojos, para asemejarlos al resto del rostro. Una decisión que puede implicar numerosos riesgos para la salud, aunque Eli sabe perfectamente a lo que se enfrentaba: "Es un riesgo que tomas cuando dejas que cualquiera trate tus ojos, ya que hasta los cirujanos con más experiencia pueden cometer errores".
Sus perforaciones en nariz, oreja y labio completan el evidente parentesco con una persona de una tribu africana, una corriente artística seguida por muchos artistas actuales, conocida como primitivismo moderno.
"Nunca estará terminado"
Como era de esperar, la decisión de Eli ha sido muy criticada, tanto por las redes como por su círculo cercano. "La única persona que siempre entenderá mi transición soy yo. No intento describírsela a nadie (...) Lo mejor son los comentarios amables, ya sean de expertos en tatuajes o de gente normal. Lo peor son las generaciones mayores que te miran por encima del hombro y quieren hacerte sentir inútil". No obstante, agradece el apoyo de su novia, que le ha acompañado en buena parte del proceso.
A la hora de hablar sobre el futuro, Eli tiene claro que está muy lejos de acabar su obra: "Nunca estará terminado. Terminaré los estudios, pero durante el resto de mi vida me dedicaré también a la modificación del cuerpo y a perfeccionar mi trabajo".