Un hombre chino, se llevó una amarga sorpresa al descubrir que el pequeño perro que había comprado como animal de compañía meses atrás, en realidad era una rata. Según medios locales, el sujeto en cuestión un empleado de oficina, el cual quería un perro que le hiciera compañía. Por ello, se llevó el animal a su casa, completamente confiado... hasta que se llevó una sorpresa que jamás olvidará.
Poco después, comenzó a sospechar de que el animal que le habían vendido no fuera un perro, pues se notaba que desarrollaba cualidades evidentemente impropias de este animal. Para salir de dudas, publicó una imagen de la criatura en Facebook para preguntar a sus amigos si sabían de que animal se trataba.
Los usuarios de Facebook le indicaron que le habían vendido una rata del bambú, un roedor típico del sur de China, en lugar de un can. Después de conocer la noticia, decidió ofrecer en adopción a su rata del bambú a través de la misma red social, pues alega que desconoce como hacerse cargo del animal.
No es un caso aislado
En China no es poco común que se cometan este tipo de estafas. Se basan en vender cachorros de animales como si fueran crías de perro. Por lo general, suelen ser cachorros de oso que cuando empiezan a crecer más de lo normal, los dueños se dan cuenta del engaño. Sin embargo, el engaño con ratas es menos habitual.