Peng, un hombre de 39 años de Zhangzhou, al sudeste de China, ha desarrollado hongos en los pulmones por oler sus calcetines usados cada día después de trabajar.
El hombre acudió al hospital el pasado 23 de noviembre por una fuerte tos y dolores en el pecho que parecían ser, en primera instancia, una neumonía. Peng, que tuvo que acudir más veces al ver que seguía empeorando, estaba desarrollando problemas respiratorios. Los médicos comenzaron a hacerle más pruebas hasta que detectaron que tenía hongos en el pulmón.
Entonces Peng contó a los médicos su secreto más inconfesable: tenía la costumbre de olerse los calcetines a diario tras un día duro de trabajo. "Todos los días, después del trabajo, olía los calcetines antes de lavarlos", contó a los médicos por si tenía relación con los hongos que había desarrollado.
Sus bajas defensas hicieron que desarrollara los hongos
Los médicos achacaron esta infección pulmonar a la debilidad de su sistema inmunitario y a que dormía poco por haber tenido un hijo recientemente. Las defensas comúnmente trabajan para combatir estos hongos y sacar los radicales libres afectados de las células, sin embargo los gérmenes se han ido desarrollando ante un cansancio prolongado que ha hecho que su sistema inmunitario no trabaje con normalidad.
La práctica de Peng parecía bastante inocente. Esta curiosidad por nuestro propio olor corporal supone un placer culpable que, aunque muchos no lo confiesen, es más común de lo que se cree, pero habrá que tener cuidado y descansar bien si no se quiere desarrollar hongos.