La pandemia del coronavirus ha supuesto todo un esfuerzo de resiliencia, pero también ha dejado todo tipo de historias llenas de compasión, fortaleza y ayuda al prójimo. Eso es lo que ha demostrado Tawy Zoé, un joven indígena que caminó durante doce horas a través de la selva del Amazonas cargando con su anciano padre, Wahu Zoé, para que recibiese la primera dosis de la vacuna.
La historia ha sido relatada por Erik Jennings, médico del Hospital Regional de Baixo Amazonas, natural del municipio brasileño de Santarém. Jennings es, además de médico, fotógrafo y activo en redes sociales, donde muestra todo tipo de situaciones en el Amazonas para concienciar sobre su precaria situación sanitaria.
Jennings sigue de cerca a la tribu Zoé, de la que provienen el joven Tawi y su padre, en una de las zonas más aisladas del planeta. "Desde el comienzo de la pandemia, el pueblo Zoé se ha aislado en los pueblos más alejados de nuestra base. Se han dividido en grupos familiares e incluso evitan algunos caminos comunes", relata Jennings en su cuenta de Instagram. "Respetando esto, nuestro equipo actúa, para interferir al mínimo, en esta táctica milenaria y altamente eficiente para evitar epidemias", prosigue.
"El momento más impactante de 2021"
La tribu Zoé inició hace un año un proceso de auto aislamiento voluntario en los pueblos más escondidos del Amazonas, siendo "absolutamente ejemplares" con las medidas de precaución que aplicaban. El 22 de enero del año pasado, este pueblo tuvo por fin acceso a las vacunas, con la dificultad de que el Hospital más cercano se encuentra a seis horas de distancia a pie.
Pero esa dificultad no fue impedimento para que Wahu Zoé decidiese ir con su padre sobre su hombre para que recibiera la primera dosis, algo que Jennings captó con su cámara fotográfica. "El momento más impactante de 2021", ha escrito el doctor, "después de la vacuna, volvió a ponerse a su padre boca arriba y caminó durante otras 6 horas hasta su pueblo".
La precaución de la tribu Zoé, que inició su aislamiento voluntario, junto a su predisposición a recibir las vacunas, han sido puestos como ejemplo de actuación frente a la pandemia. El resultado es claro: ninguno de sus integrantes ha sufrido un caso de Covid-19 en uno de los países más azotados por la pandemia.
