Los pequeños Leo y Manuel, los mellizos de Pablo Iglesias e Irene Montero, han tenido que ser ingresados en el Hospital Materno Infantil Gregorio Marañón de Madrid debido a una bronquiolitis que se ha compliado. Por ello, el vicepresidente segundo del Gobierno y la ministra de Igualdad han paralizado su agenda oficial para estar junto a los niños en su recuperación.
Al no tratarse de una "zona Covid", Iglesias y Montero tienen libertad, como cualquier otro familiar de pacientes no contagiados de coronavirus, para visitar a sus hijos, que comparten habitación en el área de hospitalización infantil situada en la tercera planta de la clínica madrileña. Siempre, eso sí, respetando las medidas de seguridad.
Pese a lo difundido a través de las redes sociales y lo sugerido por algún que otro medio de comunicación que ha aprovechado la infección respiratoria de los pequeños para atacar a sus padres, estos llegaron al centro hospitalario sin ningún tipo de despliegue.
Además, los trabajadores del hospital no han recibido ninguna indicación especial sobre el protocolo a seguir ni se ha cerrado ninguna planta para atender a Leo y Manuel. El único cambio lo protagonizan los dos escoltas que acompañan a Iglesias y Montero y que permanecen sentados en el control de enfermería más cercano a la habitación de los menores.
No es la primera vez que Pablo Iglesias e Irene Montero tienen que dedicarse a sus mellizos en este centro hospitalario. La ministra de Igualdad dio a luz de forma prematura a los pequeños cuando en la vigesimoséptima semana de gestación, de poco más de seis meses, lo que les obligó a permanecer ingresados durante tres largos meses en el área de neonatoliogía.
"No les deseo una rápida cura"
Tras conocerse la noticia del ingreso de los pequeños Leo y Manuel, sus padres recibieron multitud de mensajes de apoyo deseando una pronta recuperación para los menores. Sin embargo, desde las redes sociales también se multiplicaron los mensajes de odio con malos deseos sobre la salud de los niños.
Todo lo malo que uno hace en esta vida y el veneno que destila se paga acá
— Marcelo (@mcelestinocars1) September 27, 2020
Igual es una táctica para dar pena y generar empatía. No me extrañaría viniendo de ellos, ya hay antecedentes.
— Voxcodrilo ???????????? (@voxcodrilo) September 27, 2020
Espero que se mejoren , pero francamente me importan una mierda .
— ????????????Ianus???????????? (@pasodepasar) September 28, 2020
Es que sigue habiendo mucho gilipollas buenista y que no espabilan oye. A mi sus hijos me la pela, y lo digo asi. Tan tranquila????, y si viene alguien a decirme que soy mala persona me adelanto y les digo que NO, que malas personas son ellos y toda su estirpe!
— mividaconmigosii (@mividaconmigos1) September 28, 2020
Deseo que se recuperen totalmente. Y supongo que sus padres no harán ascos a que les traten con maquinaria pagada por Amancio ortega, si se diera el caso. Supongo. El karma suele ser cabroncete.
— ROSA (@ROSA04255825) September 27, 2020
Que están ingresados??se me puso mi hija mala con fiebre y nisiquiera me la atendían, ni me la miraban los médicos. Y decían que estaban colapsados y a estos por una bronquitis la ingresan...y luego le pondrán una UVI móvil en la puerta de casa...si es que son casta.
— AnHell???????????? (@AngelBuzon2) September 27, 2020
Hospital público o privado ? Privado verdad ? Muchos niños pequeños pasan la brinquiolitis , mi hija en el público , nada que no se pueda superar , no hay que hacer un drama de ello pero claro , los marqueses son muy de dramas
— susanitatieneunraton (@susanitatiene17) September 28, 2020
Estos deleznables mensajes provienen de cuentas relacionadas en su mayoría con la extrema derecha. Parece de sentido común que, aunque se pueda tener una ideología totalmente opuesta a la de Pablo Iglesias e Irene Montero, esto no es inconveniente para desearle mal a nadie. Y menos a dos niños de tan solo dos años.
Aprovechando el ingreso de Leo y Manuel, hay quien ha querido interesarse sobre si estarían siendo tratados en un centro privado o público para de esta manera cuestionar el compromiso de sus padres en la defensa de la sanidad pública. Otros consideran un "privilegio" que los niños hayan sido ingresados y algunos, incluso, consideran que todo se trataría de una "táctica" de Montero e Iglesias para "generar empatía".
"Como los padres me dan mucho asco, no les deseo una rápida cura", ha espetado una usuaria de Twitter, a lo que ha respondido otro con un oscuro deseo: "Como cabe la posibilidad de que sigan los pasos de sus padres, no voy a llorar si no salen del hospital. Justicia divina lo llaman".
Cabe destacar que Pablo Iglesias e Irene Montero llevan meses sufriendo todo tipo de acoso a las puertas de su casa por parte de la extrema derecha, que se reúne para lanzar proclamas y amenazas en contra de los de Podemos. Tanto es así, que incluso tuvieron que cancelar unos días de descanso junto a sus tres hijos pequeños en Asturias después de que se filtrara el lugar en el que se encontraban y se conviertieran, de nuevo, en objeto de amenazas.