La Ley Trans, que ha provocado divisiones en el PSOE y tensiones entre los socios de Gobierno, es el objetivo de la nueva campaña de odio que prepara la organización radical ultracatólica Hazte Oír, que volverá a poner en circulación un autobús con lemas cargados de transfobia que circulará por las calles de Madrid.
Bajo el lema #StopLeyTrans, el autobús circulará por las calles de la capital durante dos semanas. Entre los mensajes que portará se encuentran "les niñes no existen", "no a la mutilación infantil", o "las mujeres no tienen pene", que recuerda al autocar que lanzaron en 2017 en su campaña contra la infancia trans: "los niños tienen pene y las niñas tienen vulva".
A través de un comunicado, Hazte Oír carga contra el Gobierno y defiende que esta ley deja "desprotegidos principalmente a los niños y a las mujeres frente a graves abusos como son la mutilación de sus genitales, la hormonación y la esterilización". Además, el grupo ultra considera que en el texto "no se reconoce el sexo biológico, por lo que cada uno decidirá lo que quiere ser cuando le venga en gana".
Bulos
No obstante, el argumentario que defiende Hazte Oír se basa en bulos o en medias verdades. La Ley Trans no establece que cualquier menor pueda cambiar su sexo. Sí podrán, por el contrario, el cambio registral del sexo que aparece en el DNI, acogiéndose a la autodeterminación de género. Es decir, sin presentar más requisitos que la voluntad. No obstante, esta variación se podrá hacer a partir de los 14 años, por lo que los menores de 12 y 13 años tendrán que someterse a otro tipo de criterios.
Tampoco la hormonación será tan accesible. El texto en tramitación estipula que "las administraciones públicas, en el ámbito de sus competencias, garantizarán una formación suficiente, continuada y actualizada del personal sanitario, que tenga en cuenta las necesidades específicas de las personas trans, prestando especial atención a los problemas de salud asociados a las prácticas quirúrgicas a las que se someten, tratamientos hormonales y su salud sexual y reproductiva". Por lo tanto, el artículo 53 de la normativa no establece nada en absoluto en lo relativo a la hormonación en menores.