Se acerca la noche más siniestra del año: Halloween. Esta fiesta que toca a la puerta de octubre al son de 'truco o trato' se celebrará el 31 de octubre.
Dicho acontecimiento es la fiesta pagana más celebrada de todas y la que más se ha extendido geográficamente hablando. Cada parte del mundo tiene su propia manera de disfrutar de ella, aunque, a pesar de las particularidades, todas coinciden en algo indispensable: la comida.
¿Te atreves a conocer las costumbres gastronómicas más aterradoras del mundo?
1 Irlanda
Este país es el verdadero originario de Halloween y no Estados Unidos como piensa la mayoría. Fueron los irlandeses los que emigraron a América y transmitieron esta tradición a los países norteamericanos y, de ahí, al resto del mundo.
Entre sus platos encontramos el boxty o las soul cakes, aunque la estrella de Halloween es, sin duda, el colcannon. Esta es una receta tradicional a base de col, puré de patatas, puerro, leche, mantequilla, sal y pimienta. Suele servirse en un bol grande y la tradición manda que se ha de comer con una cuchara directamente de él. El barmbrack también es importante en la gastronomía de este día, sobre todo porque esconde varios objetos pequeños en su pan dulce con pasas que, según cuentan, son portadores de suerte para quien lo encuentre.
2 España
En nuestro país, la festividad se celebra el día siguiente a la fecha original. Dado el marcado sentido de recogimiento que caracteriza el día de Todos los Santos, sirve para reunir a las familias y valorar la gastronomía.
Entre sus recetas destacan los huesos de santo y las castañas asadas en lugar de las calabazas. Los buñuelos de viento y los panellets también son rutinarios en la celebración española de este festivo.
Aunque, si hablamos de recetas pintorescas y desconocidas, tenemos que hablar de las gachas dulces de Jaén. Estas gachas eran utilizadas antiguamente para evitar que los espíritus que vagaban por nuestro mundo en esta fecha entraran a las casas. Para ello, se pegaban las gachas en las puertas y cerraduras de las casas. Este ritual de protección ya está prácticamente extinguido, pero las familias se siguen juntando para comer estos dulces de harina, leche, picatostes y miel.
3 Polonia
Si alguien tiene que quejarse del frío, estos son los polacos. Halloween coincide con una de las etapas más frescas de esta parte del mundo, por lo que sus habitantes han convertido en protagonistas a los platos calientes para este festivo.
El plato principal es el bigos, una receta tradicional a base de col fermentada con setas y carne de todo tipo. Esta comida es considerada por muchos polacos como el plato nacional por excelencia. Antiguamente, durante los siglos XIV y XVIII, las familias disfrutaban de ella reuniéndose en un cementerio esa misma noche. Sin embargo, esta tradición quedó enterrada y en la actualidad se reúnen en las casas.
4 Italia
Sicilia es la verdadera disfrutona del Halloween italiano. En esta ciudad no hay hueco para los espíritus malignos la noche del 31, sino que solo cabe la felicidad de los niños.
Toda su gastronomía, lejos de ser aterradora, es dulce y colorida. Destacan los frutos de la martorana, las galletas hueso de los muertos o los pupi di zucchero de Palermo, que son figuritas antropomorfas de azúcar que representan personajes variados y coloridos, desde dragones hasta figuras más contemporáneas como jugadores de fútbol.
5 México
Este país ha enraizado tanto el día de Todos los Santos que lo ha convertido en un símbolo identitario. Aquí se venera a los que ya no están con un altar casero rodeado de fotos y acompañado por velas, flores, calaveras y las comidas y bebidas favoritas del difunto.
Esta celebración dura varios días, dedicándose cada uno de ellos a un grupo determinado de personas. El primero se le dedica a los niños, por lo que el altar es dotado de gominas de todo tipo. En el siguiente, las ofrendas incluyen varios platos típicos como el mole, los tamales de cerdo, las empanadas de calabaza o pan de muerto, que es un dulce hecho con levadura que simula un cráneo pero decorado.
6 Portugal
El país vecino también tiene su particular manera de celebrar Halloween. Entre sus costumbres encontramos la noche de la antorcha de Montalegre en la que los niños roban paja y se dirigen a lo alto de los cerros para ahuyentar espíritus, brujas y demonios con la tradicional antorcha o la visita al Jardín Botánico de Lisboa por la noche, donde se realizan numerosos juegos terroríficos y concursos de calabazas y máscaras.
En cuanto a su gastronomía, no cabe duda de que para este día es imprescindible el pão de Deus, un tipo de bioche cubierto con huevo y coco. Los menos afortunados salían el primero de noviembre a pedir a las casas un poco de comida. 'Pan por Deus' (pan por Dios), era el reclamo más usado. Con el tiempo, solo los niños iban de puerta en puerta pidiendo frutos secos y pasteles.
7 Ecuador
Ecuador tiene unas costumbres similares a las de España en cuanto a Halloween. Se suele celebrar con disfraces, máscaras y hasta trajes de superhéroes.
En este país sudamericano la tradición gastronómica tiene un nombre favorito: la colada morada con las guaguas de pan. Esta bebida tradicional es una mezcla de frutas, especias y hierbas con maíz morado o negro. Las guaguas son unos dulces con forma de muñecos o niños que pueden estar rellenos de chocolate o mermelada. Esta bebida representa la sangre del difunto y las guaguas, su cuerpo.
8 Estados Unidos
A pesar de que su origen es celta, sí que es cierto que esta fiesta tiene su máximo exponente en Estados Unidos. Todo el país se tiñe de naranja para hacer referencia al elemento más característico de su celebración, las calabazas. Calles, hogares, tiendas... se cubren de calabazas, fantasmas y telarañas para recibir la noche más terrorífica del año.
Aquí son típicas las manzanas de caramelo (candy apples), un dulce cuyo origen real reside en la Navidad pero que se popularizó en Halloween por ser el regalo perfecto para los niños que van pidiendo puerta por puerta con el famoso "trick or treat?" ("¿truco o trato?"). Actualmente estas manzanas son variadas, las hay tanto negras como rojas para simular que sangran.
