Una joven de 17 años que llevaba 24 horas desaparecida ha sido hallada muerta en una vivienda de la localidad de Totana (Murcia). Su cuerpo ha encontrado en el trastero de una vivienda y se ha detenido a un joven de 19 años como presunto autor del homicidio, que está siendo investigado como un caso de violencia de género.
En el historial no constan denuncias previas. La víctima tampoco era usuaria del Centro de Atención Especializada para Mujeres Víctimas de Violencia (CAVI) de Totana, uno de los recursos de la Administración para evitar que se sigan repitiendo este tipo de casos.
La familia de la joven denunció su desaparición el pasado martes 8 de febrero y el cuerpo sin vida de la joven ha sido localizado en el trastero del domicilio del acusado. El cadáver presentaba signos de violencia realizados, según los primeros indicios, por un arma blanca, varias cuchilladas.
El cuerpo de la víctima ha sido encontrado alrededor de las 03:00 horas de la madrugada en la Avenida Santa de La Rambla. Ya se ha procedido al levantamiento del cuerpo en presencia de la autoridad judicial y los restos mortales han sido trasladados al Instituto de Medicina Legal de Murcia, donde se le practicará la autopsia para aclarar todo lo ocurrido.
El Ayuntamiento de Totana ha decretado un día de luto oficial por todo lo sucedido. Se espera que a mediodía de este miércoles 9 de febrero se organice una concentración silenciosa en la Plaza de la Constitución, frente al edificio del Ayuntamiento, para condenar lo sucedido. De la fachada del Consistorio ya cuelga un crespón negro en memoria de Claudia Abigal, la menor asesinada.
El acusado confiesa: "He sido yo"
El joven de 19 años ha confesado ser el autor del crimen después de que los bomberos tiraran la puerta y encontrasen el cadáver, según relatan fuentes cercanas al caso al diario La Opinión de Murcia. El individuo no tiene antecedentes por violencia de género y se encuentra en dependencias del Instituto Armado desde la madrugada.
Las fuentes consultadas por el citado diario aseguran que el acusado llegó a pronunciar las palabras "he sido yo" cuando las autoridades hallaron el cuerpo de la víctima, completamente ensangrentado, después de que sus padres denunciaran la desaparición de la joven el día anterior.
