El Ministerio de Hacienda ha hecho pública la compra de un "vehículo blindado de alta representación" para el disfrute único de los miembros de la Casa Real por valor de 454.000 euros, por la vía de urgencia y con la máxima confidencialidad que se permite en el ministerio público, al considerar que la transacción responde a motivos especiales de seguridad.
De hecho, el coche se ha anunciado como "propiedad del Parque Móvil del Estado" a pesar de que su uso quedará reservado exclusivamente a los inquilinos del Palacio de la Zarzuela, y se ha omitido la justificación del gasto y la descripción de las compañías que participan en el proceso.
La nueva adquisición de la Casa Real incluye, por tanto, un coche de alta gama adecuado para ser utilizado en actos oficiales y el blindaje del automóvil, que condiciona la elección del modelo y supone incrementar el peso del automóvil hasta 2.000 kilos.
Nueva adquisición para la colección de la Zarzuela
Al igual que sucede con el resto de gastos de Zarzuela, los 454.000 euros correrán por cuenta del Estado, como ocurrió con los gastos en seguridad o el mantenimiento de los aviones utilizados por los reyes. Este desembolso, sin embargo, se encontraba ya reflejado en los presupuestos de 2018 a la Jefatura del Estado, pero la compra no llegó a ejecutarse hasta ahora, momento en el que Ministerio de Defensa ha elegido la vía de urgencia sin justificar el motivo de la rapidez en la transacción.
El Parque Móvil del Estado no se gastaba una cantidad tan desorbitada desde el 2017, cuando licitó la compra de un nuevo vehículo oficial para el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy por 498.042 euros. La justificación de este gasto del presupuesto público se basó en que el coche anterior de Rajoy se encontraba deteriorado después de 16 años.
El nuevo coche es ya el número 11 de la colección con la que cuenta la Casa Real, que incluye modelos como un todoterreno Lexus híbrido modelo RX 450, que les acompaña desde el 2008; un Audi RS6; y otro de la misma marca modelo A8. Todo ello supone un importe de 28.000 euros en el transporte de los reyes, al que se puede sumar ahora una nueva cifra desorbitada. El nombre de la empresa fabricante se conocerá una vez que el vehículo sea adjudicado a sus propietarios.