Comienzan las vacaciones de verano y eso significa que muchos ciudadanos tomarán sus días libres para viajar tanto dentro como fuera de España para desconectar. Pero estas vacaciones al extranjero suelen conllevar un problema para mucha gente: tener que cargar con mucho efectivo. Esto viene dado por las grandes comisiones que cobran en lugares de cambio de moneda o en los cajeros automáticos de otros países.
Pero existe un problema legal ante esta situación: hay una cantidad máxima estipulada sobre cuánto dinero en efectivo se puede llevar encima.
¿Cuántos euros se pueden llevar en efectivo?
La Agencia Tributaria señala que se puede viajar con dinero en efectivo, pero si esa cantidad supera los 10.000 euros se debe notificar con una declaración previa en las aduanas. También sucede en España: si los viajes se producen dentro de nuestras fronteras, el límite se sitúa en los 100.000 euros. No obstante, las autoridades también pueden actuar e intervenir importes inferiores a 10.000 euros cuando "existan indicios de una vinculación a actividades delictivas", recoge la organización en su web.
Lo establece el artículo 5 de la Ley 19/1993, que regula las medidas de prevención del blanqueo de capitales. Tal y como explica Hacienda, se trata de una medida para evitar el fraude fiscal y vigilar todas las operaciones de entrada y salida de dinero en el país.
¿De cuánto es la multa si se incumple esta norma?
Si un viajero o viajera emprende su camino con más dinero de la cantidad estipulada y no lo ha declarado ante los Servicios de Aduanas o las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado podrán enfrentarse a multas que van desde los 600 hasta los 5.000 euros (o el 50% del valor del dinero que se intentaba transportar). Además, las autoridades tienen el poder de intervenir la totalidad de ese efectivo, dejando al usuario sólo con el mínimo necesario para poder sobrevivir o volver a su lugar de origen.
Incumplir estos límites también supone "una infracción administrativa grave" que conlleva sanciones. Concretamente, el artículo 7 de la Ley 7/2012, establece que la base de la sanción "será la cuantía pagada en efectivo en las operaciones de importe igual o superior" y que "la sanción será del 25% de esa cantidad pagada", lo que significa entre 250 y 2.500 euros de multa.
Cómo declarar el dinero en efectivo
Los ciudadanos deben declarar y legalizar estos movimientos para evitar las sanciones. La manera correcta de hacerlo es a través de un formulario 'S-1' donde se deben cumplimentar los datos personales de la persona que lleva el dinero y los del propietario de ese dinero, además de dar información sobre la procedencia del mismo: de dónde sale y a dónde se pretende destinar. También se debe rellenar un formulario online que se presentará en la aduana o en la autoridad competente a la entrada y salida de cada país.
No es solo transportarlo, sino usarlo
El Gobierno sacó adelante en 2021 la ley de lucha contra el fraude. Una de sus medidas principales fue la reducción de los pagos en efectivo en operaciones en las que estuviesen implicados profesionales. Según el artículo 18 de la ley, se redujo de 2.500 a 1.000 euros el límite de pago en efectivo para las operaciones en que alguna de las partes que intervengan lo haga "en calidad de empresario o profesional". En el caso de particulares con domicilio fiscal fuera de España, esa limitación es de 10.000 euros.
Hay que aclarar que el límite no se aplica a los pagos realizados en entidades de crédito ni a las operaciones de cambio de moneda en efectivo realizadas por los establecimientos autorizados para el cambio de divisas.