Los dos nuevos hallazgos realizados ayer jueves 24 de junio en la costa de Tenerife certifican todavía más la teoría que mantenían los investigadores de que Tomás Gimeno acabó con su vida (los investigadores creen que por el método de la 'muerte dulce') tras matar a sus hijas, Anna y Olivia. El buque oceanográfico, Ángeles Alvariño, encontró dos botellas de oxígeno, a diferencia de la anterior ocasión que era de aire comprimido, en la zona donde se busca a Gimeno.
Los utensilios pertenecen a Tomás Gimeno y pudo adquirirlos días antes del 27 de abril, según la investigación. Así consta en la factura que encontró la Guardia Civil en su vivienda, donde certifica la compra de ambas botellas.
Ambos envases tienen el tamaño de una botella de agua de medio litro y fueron concebidos en un primer momento para situaciones de emergencia acuática que requerían poca cantidad de aire. El tiempo adicional es de tan solo tres minutos. Inhalar oxígeno puro puede ser letal.
Ahora, los investigadores están intentando localizar el cinturón de plomo con el que Gimeno pudo intentar hundirse. El radio de búsqueda sigue localizándose en la zona donde se geolocalizó la última señal del teléfono móvil de Tomás, a las 02:07h. de la madrugada del 28 de abril, 20 kilómetros alejada del lugar donde presuntamente lanzó a sus hijas al fondo marino.
La labor del buque Ángeles Alvariño
Mientras tanto la labor de rastreo del buque Ángeles Alvariño continúa. Este barco fue quien localizó el cuerpo sin vida de Olivia. Este hallazgo rompió con otras hipótesis que también se habían contemplado de manera secundaria en la investigación. Los investigadores sospechan ahora que Gimeno introdujo en la bolsa vacía hallada en el mar a Anna.
El ancla de la lancha, con la que lastró a las dos niñas, quedó enganchada a un barco hundido, motivo or el que el robot pudo detectar el cuerpo de Olivia. Días antes el robot marino del buque había recuperado una botella de aire comprimido que Gimeno usaba para sus inmersiones y una funda nórdica procedente de su propiedad.
En las últimas horas, el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, ha pedido no perder la esperanza de encontrar más indicios o pruebas que señalen "algo más" sobre Anna y Tomás Gimeno. El barco ha tenido que realizar una parada en el puerto de Santa Cruz de Tenerife como consecuencia del mal estado del mar y el fuerte viento de la zona.
En cuanto a las posibilidades de encontrar a la niña y Tomás, el delegado indicó que no se puede hablar de probabilidades: "Era ya difícil encontrar indicios y se encontró a Olivia, algo que era inédito. Será extraordinario si se encuentra algo más", señaló. Pestaña ha destacado el compromiso del Instituto Español de Oceanografía (IEO), por ceder el buque, que ha cancelado varios compromisos.