El agente de la Guardia Civil que aceptó el pasado noviembre la condena de 15 meses por difundir 'fake new' en contra de "menas", ha sido expulsado del Instituto Armado. El Instituto Armado abrió un expediente disciplinario en el que se aplicó la sanción mayor posible por este delito de odio tras publicar un vídeo en su cuenta de Twitter para denigrar a menores extranjeros no acompañados.
La Benemérita abrió expediente disciplinario por haber incurrido en una infracción penal, tal y como establecen los protocolos internos. Después de que su expulsión del cuerpo fuese avalada por el Ministerio del Interior y el de Defensa, se le comunicó personalmente. La propuesta de expulsión fue dirigida y firmada por la ex directora de la Guardia Civil, María Gámez, quien dimitió en marzo después de que su marido fuese imputado por un presunto caso de corrupción.
La realidad: un vídeo ocurrido en China
En el verano de 2019, el agente subió un vídeo a su cuenta de Twitter en el que se apreciaba una fuerte agresión a una joven en China. El autor del tweet quiso hace creer que se trataba de imágenes de una violación que había ocurrido en Canet de Mar (Barcelona). En el vídeo llegó a ser visualizado más de 20.000 vecesy se observa cómo un hombre agredía ferozmente a una mujer a patadas y puñetazos.
El tweet, ya eliminado, acompañaba el vídeo con estas declaraciones: "Aquí tenéis el vídeo del MENA marroquí de Canet de Mar, a esos que le vamos a dar la paguita hasta los 23 años, los niños de Pedrito Piscinas. Por cierto, luego para más INRI la viola. Estos energúmenos y estas manadas de marroquíes no saldrán en los medios".
Primera condena por motivos discriminatorios
La Audiencia Provincial de Barcelona acabó sentenciando al acusado con 15 meses de prisión y una multa de 1.620 euros. Dicha condena hizo "historia" convirtiéndose en la primera que emitía un juzgado por difundir noticias falsas con intención de denigrar a personas por motivos discriminatorios.
Inicialmente el Ministerio Público solicitaba dos años de prisión. A cambio, el Guardia Civil aceptó asistir a un curso sobre igualdad de trato y no discriminación para rebajar la condena. El curso lo deberá cursar igualmente, pero ya sin el uniforme.