La Guardia Civil ha detenido en Málaga a un depredador sexual acusado de abusar presuntamente de 26 menores con los que contactaba a través de conocidas plataformas de videojuegos. Las víctimas tienen entre 8 y 12 años de edad y residen en diferentes puntos de España. No se descarta que pueda haber más casos.
La investigación ha corrido a cargo del Departamento Contra el Cibercrimen de la Unidad Central Operativa (UCO) y ha durado varios meses, que derivaron a la detención del acusado en Málaga capital por parte de los agentes el pasado mes de noviembre. El acusado es un hombre de origen italiano, de 42 años, con antecedentes por causas similares, por lo que ya había sido expulsado de España en otra ocasión.
En este tiempo se ha certificado que el acusado accedió a las plataformas de videojuegos en más de 3.000 ocasiones en el plazo de dos años, interviniéndole en la nube y en diferentes dispositivos más de 2.000 archivos de contenido pedófilo.
El arrestado construía con los menores una amistad prolongada en el tiempo mediante engaños y abusos de superioridad, pagándoles regalos virtuales en videojuegos online a cambio de realizar videollamadas en las que les inducía a que mostraran sus órganos sexuales ante él. Se le acusa de delitos de abuso sexual y de captación de al menos 26 menores con fines de producción de pornografía infantil.
La operación se inició el pasado mes de julio, tras la denuncia de los padres de un menor de 9 años, en la que se informaba de las sospechas de que su hijo estaba manteniendo contacto con un adulto con la videoconsola a través de un conocido juego online.
Regalos con los que se ganaba la confianza
El arrestado pagaba regalos virtuales disponibles en las plataformas de juego para ganarse la confianza de los menores. Estos regalos llevaban consigo la petición por parte del detenido de la realización de videollamadas con los menores, para que le mostrasen sus partes íntimas y otro tipo de acciones similares.
La investigación ha constatado la realización de 81 pagos a cuentas de usuarios de juegos pertenecientes a menores. Una vez que accedían a posar desnudos ante la cámara, el detenido capturaba la pantalla de su dispositivo móvil almacenando las imágenes de carácter sexual de los menores.
Varios de los padres mostraron su sorpresa al ser informados de las pesquisas policiales, asegurando que sus hijos no jugaban de forma online sin supervisión de adultos. Los agentes han podido comprobar la existencia de un caso de abuso sexual físico a un menor, al que conoció y engañó en una playa nudista, lugares muy frecuentados por el detenido con bastante asiduidad, a la vista del material intervenido.
El arrestado, según la Guardia Civil, también se ofrecía como monitor de deportes, de campamento y profesor de inglés, entre otras actividades relacionadas con menores, no teniéndose constancia de ninguna otra contratación en ese sentido. La investigación ha analizado más de 560 gigabytes de información.