La Guardia Civil, en colaboración con la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, han desarticulado una peligrosa célula afín a Dáesh que buscaba captar y radicalizar presos. Unos 25 presos de diferentes centros penitenciarios españoles han si identificados por las fuerzas de seguridad en una operación que se ha desarrollado bajo la autoridad del Juzgado Central de Instrucción número 1 y de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Esta macro operación es única, al menos de momento, en Europa. Una actuación, donde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha sido clave para acabar con el 'frente de cárceles', una estructura vinculada al Dáesh cuyo modus operandi se desarrolla íntegramente en el ámbito carcelario.
Al frente de esta organización de captación y radicalización de presos se encuentran tres terroristas: Jamal Zougam, condenado a más de 40.000 años de cárcel por ser el autor material de los atentados del 11 de marzo de 2014; Hassan El Haski, condenado a 14 años de cárcel por el Tribunal supremo también por el 11-M; y, por último, Mohamed Achraf, penado por liderar una célula desarticulada por la fuerzas del orden en 2014 en la operación Nova que planeaba atentar contra varios objetivos en Madrid, entre los que se encontraba el Tribunal Supremo o la Audiencia Nacional. Ellos eran los cabecillas de una organización que extendió su influencia en varias cárceles de toda España.
17 cárceles españolas afectadas
Estructurada y con una simbología propia esta célula tenía como objetivo adoctrinar en los patios de las cárceles a los reos. Tanto es así que la propia organización extendió sus influencias fuera de los muros a través de cartas a otros reclusos de otras prisiones. El objetivo de estas comunicaciones eran prisioneros vinculados con el terrorismo yihadista y otros que se han radicalizado en los propios centros. Entre estos últimos se encuentra algún español converso o en proceso de conversión.
Lo que las autoridades pretendían como una operación en una sola cárcel, pronto se extendió a otras 16 prisiones. Por lo que serían 17 centros donde la esta célula vinculada al Dáesh habría extendido sus influencias: Las Palmas II, Teixeiro, Estremera, Villena, Algeciras, El Puerto de Santamaría III, Ocaña I, Zuera, Mansilla de las Mulas, Soto del Real, Huelva, Murcia II, Mallorca, Valencia, Albolote, Córdoba y Villabona.