Cuatro años y medio de prisión. Esa es la pena a la que se enfrenta un agente de la Guardia Civil en Oliva (Valencia) por interponer multas de tráfico completamente falsas. Entre las infracciones, saltarse un stop, no llevar cinturón, tirar una colilla, tener la ITV caducada o no hacer caso a los requerimientos.
El agente, del destacamento de Tráfico de Gandia, impuso las sanciones a un conductor el 1 de agosto de 2021 a la salida de esta localidad valenciana. El jefe de pareja de la patrulla, sin embargo, sospechó que todo era falso y alertó a los superiores, que abrieron un expediente disciplinario por falta grave.
Después de analizar los indicios, el instructor del expediente puso los hechos en conocimiento de la Fiscalía, que ha solicitado para el agente una pena de cuatro años y medio de cárcel, además de multa e inhabilitación especial por cinco años, por un presunto delito de falsificación de documento oficial cometido por funcionario público, según publica El Diario.
El guardia niega haberse inventado las multas y afirma que vio todas las infracciones. Asegura que anotó la matrícula del hombre y que elaboró posteriormente los boletines de denuncia en un área de servicio, además de que no tiene ninguna relación con el conductor.
La pareja del guardia civil, con el que estaba realizando la patrulla, sin embargo, mantiene otra postura. Asegura que en ningún caso vio las cinco infracciones que le interpuso ni que su compañero le indicó al presunto infractor con señales luminosas que parara su camino.
Su pareja cuenta con mayor antigüedad en el cuerpo. Ambos se sentaron posteriormente a tomar un café y fue cuando el agente investigado le comentó que iba a denunciar al supuesto infractor: "Me sorprendió porque cinco boletines lo veo excesivo, es muy difícil ver cinco infracciones", ha declarado. Además, en el atestado había datos que le sorprendían, como indicar que se había saltado una señal de stop cuando en el lugar de las infracciones hay un semáforo, o que el hombre había sido notificado cuando realmente no había presenciado la entrega de la denuncia.
La fiscal pide anular las multas al considerar que son "absolutamente falsas"
La fiscal sostiene que las multas interpuestas contra este conductor son "absolutamente falsas" y, por este motivo, ha pedido que sean inmediatamente anuladas y, posteriormente, se condene al agente implicado. Además, señala que las manifestaciones que ha aportado la pareja del agente, que ejerce como testigo, son "claras, concisas y determinantes".
La defensa del agente, por su parte, ha pedido su absolución al considerar que no existe "ni una sola prueba" que acredite los hechos. Además, ha argumentado que en el parte de servicio hay una distancia de 30 kilómetros en el trayecto recorrido por el acusado y el testigo, que desmentiría que el jefe de pareja estuviera durante todo el trayecto delante de su motocicleta, por lo que "en algún punto se separan".
