Nadie duda de la importancia de las guarderías para educar a los niños en edades tempranas, donde adquieren los conocimientos básicos sobre la vida. Y entre uno de estos aprendizajes parece que destaca la estética, al menos para algunos profesores de la guardería Boys&Girls, en el Estado de Washington.
Una madre dejó a su hija de 2 años en este jardín de infancia y, cuando fue a recogerla, se la encontró con las cejas depiladas y el entrecejo enrojecido, fruto de una más que probable depilación con cera.
La joven, de 19 años de edad, mostró su indignación en Facebook, calificando de "abuso" este hecho. "Crié a mi hija y amo cada pequeña cosa sobre ella, y estas supuestas mujeres se encargaron de corregir la forma en la que debería lucir", sentenció.
El Estado de Washington y el propio centro han abierto una investigación
La publicación de la madre se ha compartido más de 20.000 veces en apenas unos días, lo que ha provocado que el Departamento de Aprendizaje Temprano de Washington tome cartas en el asunto e investigue la denuncia.
La guardería, ante la presión y las críticas recibidas, decidió también iniciar una investigación, y se disculpó públicamente en un comunicado, en donde afirmaban que se tomaban "muy en serio" este problema. El primer paso podría ser enseñar a sus profesores que el aspecto físico no es importante, y que, desde luego, no es su tarea.