Los hospitales no podrán discriminar a ningún paciente en las UCI en función de su edad. Así se recoge en el documento sobre "aspectos éticos en situaciones de pandemia" que ha publicado el Ministerio de Sanidad y ha distribuido entre los profesionales sanitarios.
La medida choca directamente con las directivas de algunas comunidades autónomas, principalmente Cataluña, que pide no ingresar en cuidados intensivos a los pacientes mayores de 80 años. Con un mando único centralizado en el Gobierno, esta orden anula el criterio que hasta ahora imponía la Generalitat de Cataluña.
El documento no deja lugar a dudas: "Excluir a paicentes del acceso a determinados recursos asistenciales o a determinados tratamientos, por ejemplo, por razón únicamente de una edad avanzada, resulta contrario, por discriminatorio, a los fundamentos de nuestro estado de derecho (artículo 14 de la Constitución Española)", reza el escrito.
Por todo ello, se establece lo siguiente: "Los pacientes de mayor edad, en caso de escasez extrema de recursos asistenciales, deberán ser tratados en las mismas condiciones que el resto de la población, es decir, atendiendo a criterios clínicos de cada caso en particular".
En caso de falta de recursos, la edad no se puede incluir como factor
El escrito critica que "aceptar tal discriminación comportaría una minusvaloración de determinadas vidas humanas por la etapa vital en la que se encuentran esas personas, lo que contradice los fundamentos de nuestro Estado de Derecho, en particular, el reconocimiento de la igual dignidad intrínseca de todo ser humano por el hecho de serlo".
Con ello, España continúa con su estrategia de primar la atención para todos los pacientes que acuden a un hospital con síntomas de coronavirus. Una vía muy diferente a otras como la de Países Bajos, que pide a sus ancianos que no acudan a un médico bajo ningún concepto.