En pleno contexto de inflación de los precios, los precios del metro de Buenos Aires han multiplicado por cuatro sus tarifas para todos los usuarios. Se trata de una medida incorporada al paquete de austeridad que está desarrollando el presidente argentino, Javier MIlei, que ha incluido importantes recortes en los planes de protección social para toda la población.
De este modo, los precios del metro han aumentado repentinamente desde 125 pesos hasta 574 pesos. A pesar de que el metro es competencia de la capital y está operado por una empresa privada, la administración ha adoptado esta subida después de que Javier Milei haya recortado los subsidios federales al transporte público de forma generalizada, algo que está obligando a muchos gobiernos locales a subir los importes.
La medida había sido recurrida ante la justicia argentina, sin embargo, un magistrado ha levantado la suspensión temporal sobre el incremento de precios previsto y, de este modo, la política para aumentar los importes del transporte público se ha visto finalmente aplicada.
El incremento de los precios no se ha restringido al metro, sino que también se ha aplicado en los autobuses y trenes que operan en la capital y el área metropolitana. A pesar de que los precios se han multiplicado repentinamente por cuatro para la población, se espera que continúen subiendo.
Los precios continuarán subiendo en junio
De hecho, existe una meta para situar el viaje en el metro de Buenos Aires en 757 pesos en junio, como aparece reflejado en el boletín oficial del Gobierno local. De este modo, los precios del transporte se multiplicarían por seis durante todo el período afectado.
Las tarifas del metro se encontraban fuertemente subvencionadas por la Administración, algo que propuso atajar el presidente argentino. Sin embargo, la medida se ha adoptado en un contexto en el que la mayoría de los ciudadanos del país están afrontando un fuerte plan de recortes sociales.
Además, esto ocurre en un contexto en el que que se une la inflación anual del 289 por ciento y la incapacidad de los salarios para adaptarse a los incrementos de precio en los bienes. Todos estos hechos, en su conjunto, han provocado un fuerte empobrecimiento de la población.
El presidente argentino, en todo caso, sitúa las medidas en el largo plazo y defiende que supondrán el germen de un crecimiento económico. El ministro de Economía, Luis Caputo, ha defendido el superávit financiero en las cuentas públicas, derivado de los recortes sociales, que acumula cuatro meses con resultados positivos.