El Gobierno exhumará a Franco este jueves 24 de octubre a las 10:30. La ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, estará presente en todo el proceso como notaria mayor del Reino. La familia del dictador ya ha sido informada para asistir al proceso, que se realizará sin honores como pretendían sus herederos.
Las intenciones iniciales del Ejecutivo de Pedro Sánchez pasaban por exhumar al dictador entre el lunes 21 y el martes 22, pero finalmente no ha sido posible por la complejidad del operativo y se ha retrasado unos días. No obstante, la familia sabía que la salida de sus restos era inminente porque el operativo ya estaba prácticamente listo y habían sido avisados desde Moncloa.
En la nota de prensa difundida por el Ejecutivo en funciones, se señala que en Mingorrubio se encuentra enterrada su viuda, Carmen Polo y que "tanto la exhumación como la reinhumación se llevarán a cabo en la intimidad, en presencia de sus allegados".
Moncloa justifica su decisión: "El Gobierno ha defendido desde el principio del proceso que los restos del dictador no podían continuar en un mausoleo público que exaltara su figura, algo expresamente prohibido por la Ley de Memoria Histórica".
Además recuerda que la decisión de exhumar a Franco cuenta con el aval de una sentencia del Tribunal Supremo que "puso fin al proceso contencioso-administrativo interpuesto por la familia para intentar impedir su salida del Valle de los Caídos".
La maquinaria que se encargará de realizar la exhumaicón ya se encuentra en la Basílica. Además, la Guardia Civil está reforzando sus plantillas en los puestos situados en las cercanías del Valle de los Caidos y con sede en la localidad de San Lorenzo del Escorial, a la que también pertenece el conjunto.
"Se cierra simbólicamente el círculo de la democracia española"
El comunicado zanja la exhumación con las siguientes palabras: "El presidente del gobierno en funciones, Pedro Sánchez, señaló tras conocerse el fallo que de esta manera se cerraba simbólicamente el círculo de la democracia española".
En el cementerio de Mingorrubio destacan los restos de importantes personalidades de la dictadura. Entre ellos, sus dos últimos presidentes del Gobierno, el almirante Luis Carrero Blanco, asesinato por ETA en el año 1973 y Carlos Arias Navarro, que anunció la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975.